La biotecnología está entre los sectores que crecen en solicitudes de patentes en Europa. Así se ha puesto de manifiesto en una jornada organizada por la Asociación Española de Bioempresas (ASEBIO) y la Fundación PONS, en la que se ha analizado el impacto, en este ámbito empresarial, de la nueva Ley de Patentes, que ha entrado en vigor este mes de abril y tiene como principal objetivo alinear la normativa española a la europea.
A lo largo de la jornada se han puesto en valor los datos de la Oficina Europea de Patentes correspondientes a 2016, que confirman a la biotecnología como el décimo sector con más solicitudes de patentes en el continente, con un total de 5.744. Además, estos números suponen un crecimiento del 0,3% respecto al año anterior, convirtiéndose así en una de las pocas áreas que crecen en solicitudes. En concreto, junto con la biotecnología, sólo lo han logrado el transporte, la maquinaria electrónica y las tecnologías médicas.
Por su parte, España está en el puesto número 17 en cuanto a solicitudes de patentes respecto a otros países europeos, con un total de 1.558 el pasado año. Sin embargo, desciende hasta el 27 si se habla de solicitudes de patentes por millón de habitantes. En definitiva, España representa solo el 1% de las patentes solicitadas en la Oficina Europea.
En este contexto Patricia Ramos, directora de Patentes de PONS IP, ha destacado las consecuencias positivas que, a su juicio, traerá la nueva Ley de Patentes, ya que “reforzará la seguridad jurídica de las patentes concedidas y fomentará la producción de patentes más fuertes desde nuestro país”. En este sentido, ha recordado que las principales novedades de esta normativa son la implantación de un único sistema de concesión de patentes con examen previo de novedad y actividad inventiva.
Según ha explicado Ramos, la ley se inspira en el Convenio de la Patente europea y “lo que hace la nueva ley es simplificar y hacer más fácil la tramitación de las solicitudes de patentes, ordenando la dispersión normativa actual”.
Modelos de Utilidad y tasas para universidades públicas
Patricia Ramos también ha resaltado la figura de los Modelos de Utilidad. La nueva ley amplía el ámbito de protección bajo esta modalidad, como una alternativa "cada vez más atractiva" para ciertas invenciones. En su opinión, al no requerir de examen previo "podría ser una alternativa eficaz, más rápida y económica respecto a la opción de la patente en ciertas innovaciones".
La nueva Ley de Patentes también incluye el fin de la exención de tasas para las Universidades públicas. A este respecto, la directora de Patentes de PONS IP ha aclarado que los centros tendrán una bonificación del 50%, "que será del 100% siempre que acrediten que la invención ha llegado al mercado a través de licencias de explotación, por ejemplo".
Secreto industrial
Finalmente, a lo largo de la jornada también se ha analizado otra novedad importante de esta ley, en relación a las invenciones realizadas en el marco de una relación de empleo o de servicios. Amaya Mallea, directora de Consultoría Tecnológica de PONS IP ha afirmado que "por primera vez se establece en la Ley de Patentes la posibilidad de proteger una invención como secreto industrial". En este sentido, también ha enfatizado que el investigador tendrá "en todo caso" derecho a participar en los beneficios que se obtenga de la explotación o de la cesión de sus derechos, cuando la patente se solicite a nombre de la entidad o se decida el secreto industrial.