Por Juan Carlos de la Hoz y Yajaira Archibald. Esta columna fue publicada originalmente en el blog Sostenibilidad del BID
“Esta es una oportunidad para repensar el turismo y repensar las economías que se basan en él, urge Graham Watkins, jefe de la División de Cambio Climático y Sostenibilidad del BID, durante la tercera entrega del podcast Turismo en el Caribe: Historias de campo durante COVID -19.
A pesar de su impacto devastador en las vidas y los medios de subsistencia de millones de personas en nuestra región, la pandemia es un catalizador para que el Caribe reconsidere el turismo. Mientras los países intentan reiniciar este motor económico vital, las partes interesadas están buscando formas no solo de reanudar la actividad turística, sino también de cómo crear un sector que conduzca a economías más sostenibles e inclusivas.
Durante el podcast, Watkins ofrece una visión de cómo podría ser una recuperación sostenible y cómo el turismo puede desempeñar un papel importante. Él describe cinco áreas principales que podrían jugar un papel crucial en reactivar el crecimiento económico en el Caribe, que no solo tienen relevancia sobre el turismo, sino también para otras áreas económicas que lo complementan. Estas áreas son relevantes para la sostenibilidad a largo plazo, incluido el cambio climático y la desigualdad, que son las principales preocupaciones de nuestra región.
1. Impulsar la resiliencia social
- Esto requiere un enfoque en la construcción de sistemas de salud sólidos, mecanismos de protección social y capacidades de gestión del riesgo de desastres, así como en edificios y viviendas ecológicas para que sean más resilientes, al mismo tiempo que se invierte en educación y reciclaje para poder implementar con éxito los cambios necesarios.
2. Apoyar la infraestructura sostenible
- Invertir en un mayor uso de las comunicaciones digitales, las energías renovables, la electromovilidad, los servicios de agua, educación y saneamiento y promover una economía circular.
3. Garantizar la resiliencia en el mundo natural mediante soluciones basadas en la naturaleza
- Rehabilitar y restaurar áreas naturales para proteger servicios ecosistémicos vitales para aumentar la resiliencia, garantizar la seguridad alimentaria y fortalecer los sistemas agrícolas y las cadenas de suministro. Esto puede ayudar a generar empleo rápidamente y complementar los emprendimientos ecoturísticos que dependen de la naturaleza.
4. Modificar políticas para apoyar estas acciones
- Para ver resultados significativos a largo plazo, se debe implementar el marco de políticas necesario, incluida la implementación de impuestos verdes y al carbono para generar ingresos, reducir y eliminar cuidadosamente los subsidios a los combustibles fósiles y aumentar la eficiencia del gasto público.
5. Cambiar los sistemas financieros para apoyar una recuperación sostenible
- Ayudar a acceder a la financiación del sector privado a través de los mercados de capital, movilizar a los inversores para llenar los vacíos financieros dada la falta de espacio fiscal y mejorar la gestión de riesgos de los sistemas financieros.
Las sugerencias de Watkins resonaron entre los panelistas del podcast, Ian McNeel y Mahmood Patel, quienes son actores clave en el sector del ecoturismo de Barbados. Ambos administran instalaciones y propiedades que incorporan un enfoque holístico y regenerativo del turismo.
McNeel, un emprendedor social y fundador de la Reserva Walkers ubicada en la escarpada costa este de Barbados, destaca los beneficios de pasar del turismo sostenible al turismo regenerativo, enfatizando: “El turismo regenerativo está yendo más allá de algo que es simplemente sostenible, que es hacer menos daño. Este continúa restaurando y regenerando el daño que se hizo y la degradación que ya le hemos hecho al medio ambiente a través del turismo y otras formas en el mundo natural”.
Mientras tanto, Patel, propietario y operador del Ocean Spray Hotel y el proyecto de agroturismo Coco Hill Forest en Barbados, explica las diversas formas en que sus negocios buscan ofrecer un producto turístico más sostenible y resiliente al vincular la finca a la mesa y ofrecer tours ecológicos en su finca, así como productos alimenticios de producción local para los huéspedes del hotel.
Como destacaron los panelistas, el COVID-19 ha tenido efectos devastadores en la industria turística de América Latina y el Caribe, pero también ha abierto una oportunidad para repensar cómo el sector turístico agrega valor a la economía y la sociedad. No debemos perder esta oportunidad de unirnos para crear un nuevo modelo turístico que sea beneficioso para nuestros países y construya economías más sostenibles e inclusivas.