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El salmón del Nansa vuelve a casa gracias a un ascensor

Acciona y la Confederación Hidrográfica del Cantábrico colaboran en un proyecto que recuperará el hábitat natural de estos peces y luego regresar al mar
ascensor peces

Un ascensor será el responsable de que el río Nansa, en Cantabria, pueda volver a contar con salmones en su hábitat natural. Históricamente, este río era el lugar donde los peces desovaban –esto es, donde ponían huevos– antes de volver al mar. Ahora, este proceso será de nuevo posible gracias a Acciona y la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, que se han unido para crear este proyecto de sostenibilidad.

El ascensor irá situado en la margen derecha del río, en sentido de la circulación del agua. Concretamente, irá a la presa de Palombera, de unos 20 metros de altura. Cuando los peces intenten subir el río y topen con la presa, se darán con pequeñas balsas artificiales o artesas que hagan que se introduzcan en una cabina metálica que está sumergida en el agua. De este modo, la cabina puede subirse gracias a unos raíles que llevarán a los salmones hasta la parte superior de la presa.

Este sistema de balsas, artesas, puestas en cascada generan lo que desde Accionan denominan como “efecto llamada”, el que atrae a los peces para que se metan en la cesta del ascensor. Todo ello se hace gracias a una subida automática, cuya frecuencia se programa teniendo en cuenta el índice de paso de ejemplares y las distintas épocas del ciclo vital del salmón.

Así, una vez que los salmones hayan subido al embalse, podrán remontar agua arriba el río a través de dos escalas tradicionales –ya que el desnivel a salvar era menor, no como en Palombrera– en Celis y Vendul. Será arriba, en las áreas documentadas históricamente, donde los peces puedan desovar, en el curso medio del Nansa y sus afluentes, Lamasón y Vendul.

Del mismo modo, Acciona ha habilitado, además del ascensor, otra escala de peces –“sin funcionalidad durante décadas”, apuntan– para que las crías de salmón puedan volver al mar desde arriba del embalse a la desembocadura del río. “Con ello, se completa un sistema integral de paso de Palombera para el regreso de los jóvenes salmones hacia el mar hasta la madurez, cuando remontarán al lugar de nacimiento”. 

Un proyecto monitorizado

Además, Acciona ha instalado un sistema para monitorizar el viaje de los salmones; también podrán transmitir información hidrográfica en tiempo real. Junto a la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, podrán obtener así datos relevantes sobre el régimen fluvial y llevar a cabo una detección temprana de avenidas. “Este sistema ofrece también la posibilidad de adoptar medidas en tiempo real para asegurar el caudal ecológico en todo el cauce del río”, indican.