El presidente de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet, y su homólogo en la Cámara Oficial de Comercio de España en EEUU, Alan Solomont, han firmado un convenio de colaboración por el que ambas instituciones buscan fomentar la internacionalización de las empresas españolas en el país norteamericano.
Según este convenio, la Cámara de Comercio española en EEUU compartirá con la Cámara de España las oportunidades de negocio existentes, para hacérselas llegar a los empresarios interesados e incorporará a trabajadores en prácticas para contribuir a su formación en negocios internacionales. Por otro lado, ambas instituciones colaborarán en el impulso, promoción, dinamización y desarrollo del arbitraje institucional y otras formas alternativas de resolución de controversias. Por su parte, la Cámara de España colaborará en programas de formación para directivos y personal permanente de la Cámara de EEUU
En definitiva, según ha manifestado Alfredo Bonet, director internacional de la Cámara de Comercio de España, “se trata de sumar fuerzas para poder ofrecer a las empresas españolas más y mejores servicios para abordar el mercado de EEUU”. En su opinión, el país norteamericano constituye “un mercado especialmente interesante para las empresas españolas ante la próxima conclusión de negociaciones de la Asociación Transatlántica para el Comercio y la Inversión (TTIP), que abrirá nuevas posibilidades de negocio, en especial, paras las pymes”.
Más acuerdos similares
Bonet también ha adelantado que la Cámara de España va a suscribir convenios de colaboración similares con toda la red de cámaras de comercio españolas en el exterior. Todo bajo la idea de que “una mayor colaboración con la amplia red de cámaras en el exterior es esencial para apoyar la internacionalización de las empresas españolas en aquellos mercados en que están localizadas”.
El objetivo final de todas estas actuaciones, ha destacado el director internacional de la Cámara de Comercio de España, es dar respuesta a las oportunidades que se abren de la mano de la globalización ya que actualmente hay “miles de empresas que solo operan a nivel nacional y tienen gran potencial de internacionalización, aunque una buena parte no sean todavía conscientes de ello”. De esta forma, según Afredo Bonet, si “las pymes se abran paso en los mercados internacionales, la economía española estará en condiciones de dar un nuevo salto de modernidad y progreso en la próxima década”.