PwC ha puesto en marcha el área de Empresas de Alto Crecimiento, destinada a asesorar e impulsar Scale Ups, compañías innovadoras, de hasta unos 80 millones de euros de facturación, y que se encuentran en una fase de exponencial de crecimiento y de expansión. Con esta iniciativa, PwC refuerza su posicionamiento en el mundo del emprendimiento. El área estará dirigida por Alberto Tornero, socio de PwC, y una referencia para el ecosistema emprendedor en la última década.
En conversación con Innovaspain, Tornero percibe que el tejido de las Scale Ups españolas, pese a su relativa juventud, está sorprendiendo dentro y fuera del país tanto por el volumen de compañías como por su crecimiento. “Llevamos diez años trabajando en el entorno de las Start Up. Apostábamos por la necesidad de que el ecosistema generase un grupo de Scale Ups de mayor tamaño. Desde hace un par de años vemos como, efectivamente, se va consolidando”.
El área de Empresas de Alto Crecimiento estará enfocada en los retos que el crecimiento exponencial genera en este tipo de compañías. “El entorno gana en complejidad, así como las necesidades, específicas en ámbitos muy diversos como personas, operaciones, fiscalidad o inversión”, señalan desde PwC. En cuanto a qué actividades son especialmente susceptibles de acumular más Scale Ups, Tornero considera que su calado es trasversal. “Educación, sanidad, fintech, contenidos, protección de activos, ciberseguridad… La buena noticia es que aprovechan los huecos que existen en todos los sectores”.
“En los últimos años hemos aprendido que no existen dos Scale Up iguales. Pese a ello, los problemas de crecimiento suelen generar patrones relativamente parecidos”, añade. Con este bagaje, en PwC acompañarán a las Scale Ups sin obviar que son los empresarios y empresarias que las lideran quienes, “con su visión y audacia”, van a conseguir que sus empresas sigan creciendo.
Alberto Tornero se detiene para destacar el papel de otro tipo de empresas que crecen a buen ritmo: las compañías de tamaño medio españolas. “Son un grupo de empresas que, por no tener un crecimiento exponencial, a veces quedan fuera del radar. Sin embargo, son fundamentales para el crecimiento del tejido empresarial español; generan puestos de trabajo, competitividad, y articulan el territorio”.
Es en este ámbito donde el socio de PwC opina que existe una innovación a veces no tan obvia o con tanto foco, pero que es la artífice de crecimientos importantes y beneficios muy relevantes. “El segmento de la mediana empresa española que crece es muy importante en nuestro enfoque y estrategia. De ahí nuestra propuesta de ampliar el foco y ayudar, articular y también poner recursos y atención en estas empresas, numerosas, pero no siempre conocidas”.
Madurez del ecosistema
Alberto Tornero insiste en una percepción positiva del ecosistema emprendedor español, cuya madurez se ha terminado de confirmar a lo largo de los últimos cuatro años. “Es probable que, años atrás, el valle de la muerte de una Start Up consistiera en hacerse con financiación o inversión para seguir adelante. En mi opinión, hoy los problemas son otros”. Entre estas dificultades, el responsable del área de Empresas de Alto Crecimiento destaca la evolución del producto cuando se escala, la capacidad de los empresarios y empresarias para dar el siguiente paso en la gestión o acertar con la confección del equipo”.
A que el viento sople a favor ayuda, según Tornero, la sofisticación del tejido Start Up y Scale Up en todas sus aristas. “Contamos con unicornios, compañías que salen a mercados como el estadounidense, incremento de fondos…” El socio de PwC añade la evolución en modelos de innovación abierta representada por Lanzadera o Wayra -que hace tiempo cambió el foco y el claim: “We Scale Startups”- y la apuesta del sector público con ENISA o el CDTI. “Para una cultura y una sociedad como la española esto es muy positivo. Ahora sólo falta que los hechos lo confirmen. En PwC queremos contribuir a ese crecimiento”.
La pandemia y sus oportunidades
¿Cómo ha impactado la pandemia en este segmento empresarial y cómo influirá la crisis global en sus próximos pasos? Alberto Tornero afirma que hay razones para pensar que la irrupción del SARS-CoV-2 ha afectado menos a Start Ups y Scale Ups que a otro tipo de empresas, aunque admite que algunas tienen problemas de viabilidad a corto plazo. “Son compañías acostumbradas a pivotar rápido, con un control de gastos ajustado que les permite maniobrar con agilidad. También están habituadas a buscar financiación o inversión en momentos complicados. Además, su flexibilidad posibilita que aprovechen las oportunidades antes que otras empresas”.
En cuanto a su porvenir, Tornero cree que la pandemia ha inoculado en la sociedad una idea de que en no pocas ocasiones vivimos en una falsa sensación de seguridad. “Esto nos lleva a estar prevenidos para afrontar situaciones complejas que no siempre dependerán de nosotros mismos, sino que serán incontrolables. Las empresas -sean o no Scale Ups- son entes vivos que se desarrollan en sociedad. Dependen de sus dinámicas. Opino que, si aprovechamos bien el actual contexto, y una vez superada, la pandemia puede ser más una fortaleza que un problema para las compañías. Las empresas tendrán que estar más preparadas para contingencias futuras en un mundo cada vez más interdependiente”.
