La compañía farmacéutica Almirall y el Barcelona Supercomputing Center (BSC)se han unido para comenzar una investigación con la que pretenden desarrollar metodologías computacionales de alto rendimiento para aplicarlos en fármacos destinados a enfermedades inflamatorias de la piel. Esta colaboración, financiada por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, se llevará a cabo bajo el nombre de SilicoDerm.
El BSC, a través del grupo Electronic and Atomic Protein Modeling Group (EAPM) del departamento de Life Sciences, identificará así compuestos activos para el tratamiento dermatológico de las enfermedades en las que Almirall es experta: la dermatitis atópica y la psoriaris. De este modo, en SilicoDerm desarrollarán metodologías computacionales para dos terapias “novedosas” y sintetizarán y evaluarán los compuestos identificados in-silico –“es decir, por vía de simulación computacional; hecho por supercomputadoras”, explican–. Con el método de detección virtual 3D basados en proteínas, indican, se podrán estudiar “miles de compuestos de una manera más rápida y fiable que las metodologías computacionales actuales”.
La tecnología principal del BSC con la que llevarán a cabo este proyecto se llama Protein Energy Landscape Exploration, más conocida por ellos como PELE. Es, básicamente, un programa de simulación que predice la estructura de las proteínas combinando diferentes técnicas computacionales. Es, además, una de las joyas de la corona del BSC, ya que llevan perfeccionándola más de 15 años. Con ella, “se mejora significativamente las capacidades de muestreo de otros softwares. Puede usarse para resolver una amplia variedad de problemas de reconocimiento molecular, incluidos el diseño de fármacos y la ingeniería de enzimas”.
“Hemos invertido muchos años de investigación para llegar hasta aquí”, asegura el doctor Víctor Guallar, líder del grupo de Electronic and Atomic Protein Modelling (EAPM) del BSC. “Este proyecto –subraya–, muestra la madurez de las técnicas de modelización desarrolladas en el BSC para abordar proyectos de diseño de fármacos en la vida real”. Por otro lado, el doctor Jordi Gràcia, jefe de Descubrimiento de Fármacos de Almirall, ha declarado respecto a este acuerdo de colaboración que “es una oportunidad excepcional para la I+D de Almirall. La aplicación de estas novedosas metodologías computacionales para el diseño de fármacos facilitará la identificación de nuevos compuestos. De este modo se reducirá el tiempo de desarrollo de nuevos medicamentos y se ampliará nuestro espectro de posibles tratamientos para cubrir las necesidades médicas insatisfechas de pacientes con enfermedades de la piel.”