El Pleno del Ayuntamiento de Madrid aprobó este martes la ordenanza por la que se regularán distintos entornos controlados de pruebas, también conocidos como sandbox, para desarrollar proyectos tecnológicos e innovadores en toda la ciudad. De este modo, el Consistorio dota de las herramientas y procedimientos necesarios para evaluar y gestionar los riesgos de implementar en la sociedad futuras innovaciones y avances tecnológicos.
La ordenanza, desarrollada por el Área Delegada de Innovación y Emprendimiento, ha sido aprobada con la incorporación de 18 enmiendas, diez del Grupo Municipal Más Madrid y ocho del Grupo Municipal Socialista, con el objetivo de buscar el máximo consenso en una regulación pionera en la capital.
Un hito en España y Europa
Como explica a Innovaspain el concejal delegado de Innovación y Emprendimiento, Ángel Niño, es una ordenanza en la que el Ayuntamiento de Madrid llevaba mucho tiempo trabajando. “Está en consonancia con el ecosistema innovador, que reclamaba una regulación que permitiera aligerar la burocracia y establecer un entorno controlado y seguro para poder llevar a cabo proyectos y pruebas de concepto innovadoras en toda la ciudad. A nivel europeo, sitúa a Madrid como un catalizador de talento tecnológico, de empresas y de inversión”.
Desde el ayuntamiento consideran que, además de los beneficios para las empresas, el sandbox contribuirá a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, por ejemplo, a través de soluciones más eficientes para la movilidad, la gestión de residuos o la seguridad. Ángel Niño añade que la aprobación de la ordenanza “marca un antes y un después en nuestra capacidad como ciudad para gestionar, fomentar y liderar la innovación tecnológica”.
Primeras pruebas este año
Niño apunta que, “al tratarse de una ordenanza prácticamente pionera” es difícil aventurar cuándo tendrán lugar las primeras pruebas. “A lo largo de 2025 esperamos que la innovación se respire en cada rincón de la ciudad de Madrid con diferentes pruebas en desarrollo”. Tras su aprobación en el Pleno, se ha abierto un espacio en sede electrónica (accesible aquí https://lnkd.in/d4gHxxtp) para que los ciudadanos y empresas puedan presentar sugerencias, propuestas y proyectos relacionados con diversas materias.
En función de esas propuestas, se abrirán las primeras convocatorias. Por ejemplo, la seguridad vial podrá mejorar con tecnologías de asistencia al conductor e implementación de infraestructuras inteligentes que evitarán colisiones. Asimismo, podrán ser optimizadas las rutas del transporte público con el objetivo de reducir tiempos de viaje y afinar la puntualidad. En materia de seguridad ciudadana, se podrán incluir sistemas de alerta temprana para emergencias, mejorando la respuesta a incendios, accidentes y actividades sospechosas.
De Villaverde al resto de la ciudad
Una de las áreas de la ciudad donde tendrán lugar las pruebas será Villaverde. “Es un distrito que se ha volcado con el proyecto del sandbox desde el mandato anterior. Presenta las infraestructuras adecuadas para que sea posible llevar a cabo gran parte de la ejecución de las pruebas. No obstante, hasta que no sepamos cuáles serán los proyectos a probar, es difícil determinar los requisitos de espacio o seguridad necesarios. Por ello, esta ordenanza va mucho más allá y es aplicable a toda la ciudad”, argumenta Ángel Niño.
En cuanto al impacto que tendrá el sandbox, un informe elaborado por Madrid Futuro prevé inversiones por valor de 500 millones de euros y señala la creación de hasta 5.000 empleos en torno a esta regulación. Ángel Niño publicaba ayer en su perfil de LinkedIN que, en un mundo como el actual, “con un marcado componente tecnológico por parte de las grandes potencias, una capital europea como Madrid no puede quedarse atrás. Por ello, facilitaremos, siempre, el desarrollo de la innovación en la sociedad. Porque Madrid avanza al ritmo de las grandes ciudades y esta ordenanza va en línea con lo que está marcando el paso en estos momentos: la tecnología”