El aumento de la resistencia de las bacterias patógenas a la acción de los antibióticos ha originado que la Organización Mundial de la Salud (OMS) solicite a la comunidad científica la búsqueda de soluciones en I+D que frenen este problema, tipificado como de graves consecuencias para la población mundial. Por ello, AINIA está investigando la aplicación de bacteriófagos como sustitutivos de antibióticos dentro de una nueva línea de innovación orientada en la búsqueda de soluciones basadas en este tipo de microrganismos.
Esta investigación podrá ser aplicada no solo en el ámbito de la salud humana, sino también en la agricultura, usando los bacteriófagos como sustitutivos de pesticidas y fitosanitarios, en la ganadería, como alternativa al uso masivo de antibióticos en ganado, y en la alimentación, para el control de patógenos como, por ejemplo, de la salmonella. "Avanzamos hacia el concepto de medicina personalizada, en el que hay que encontrar alternativas al abuso de los antibióticos", aseguran desde el departamento tecnológico de AINIA.
En este sentido, los bacteriófagos (virus que infectan a las bacterias y son capaces de matar a las bacterias responsables de diversas patologías) son para AINIA "una alternativa posible para hacer frente al problema de la resistencia a los antibióticos". A diferencia de los antibióticos, los bacteriófagos, también conocidos como fagos, afectan sólo a la bacteria diana sin dañar ninguna otra célula y no se han hallado efectos secundarios en su utilización. Sin embargo, los antibióticos perjudican a un amplio número de bacterias, ocasionando problemas en la microbiota intestinal.
Beneficios para la agricultura
Los bacteriófagos también son capaces de infectar y matar las principales bacterias responsables de las enfermedades de las plantas. El experto de AINIA en esta materia, Josep Martínez, destaca algunos aspectos a tener en cuenta a la hora de seleccionar aquellos fagos eficaces y eficientes para la actividad agrícola, como Las bacterias sobre las que deben actuar y cómo el fago actúa sobre ellas, la inocuidad del fago para bacterias beneficiosas, la estabilidad del bacteriófago, la viabilidad industrial del proceso productivo del bacteriófago, la posible adaptación y resistencia del agente patógeno a los efectos del fago y la previsión de las posibles mutaciones genéticas del bacteriófago.