«Un niño de cinco años tiene más intuición digital que cualquiera de los que estamos aquí». Antonio Garamendi no se rasga las vestiduras al reconocer que a España aún le queda mucho camino que recorrer en materia de digitalización. El presidente de la CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales) ha reclamado en el Samsung Mobile Business Summit más y mejores acuerdos para llevar a cabo la reindustrialización del país a partir del impulso digital y la innovación tecnológica. Y en este terreno, ha aprovechado para criticar la falta de estabilidad política.
«Desde que soy presidente no para de haber elecciones», ha bromeado, al tiempo que ha asegurado no entender cómo los grandes partidos políticos «no son capaces de tejer acuerdos en materia de empleo cuando sería lo más beneficioso para el país». De hecho, a su modo de ver, «nos unen más cosas de las que nos separan», como ha comparado en el caso de la CEOE y los sindicatos, a priori con posturas sustancialmente diferentes.
En un coloquio centrado en la importancia de la digitalización para las empresas españolas, Garamendi y Pedro Mier, presidente de AMETIC, han coincidido en que el impulso de la digitalización y la innovación son los verdaderos motores que garantizan la competitividad de las compañías en el mercado internacional. «Nos encontramos en un momento decisivo para la industria, en el que vuelven a repartirse las cartas. Además de ser usuarios de la revolución digital, debemos aspirar a ser actores e inspiradores de la innovación», ha destacado Mier. Para ello, el presidente de AMETIC apuesta por «desarrollar y dominar las nuevas tecnologías habilitadoras, como la microelectrónica, inteligencia artificial, data analytics, cloud, ciberseguridad o la robótica». Garamendi, por su parte, ha manifestado la necesidad de «un proyecto industrial sólido para España».
El emprendimiento también ha salido a colación, «muy presente en el cambio cultural del país y las empresas», ha dicho Mier. Sin embargo, en un momento en el que la creación de startups comienza a estar más que presente en el ecosistema laboral español, Garamendi ha hecho un llamamiento a que «se emprenda para generar valor en España». Es decir, rehuir de la filosofía de crear una startup en España y venderla al extranjero. «Tenemos que luchar entre todos para que el talento se quede aquí y que sean las empresas españolas las que generen la tecnología».
El reto de la innovación
Según datos que el propio Antonio Garamendi ha aportado, en España el 98% de las empresas son pymes y más del 90% tienen menos de 10 trabajadores. O lo que es lo mismo, «solo el 2% forman parte del IBEX o son grandes multinacionales». Esta arquitectura de pequeña y mediana empresa motiva que «la mayor preocupación del empresario sea conseguir ser rentable y poder pagar a sus empleados». Por tanto, la innovación queda en muchas ocasiones en segundo plano.
[Te puede interesar: «Que nadie se quede atrás». La necesaria digitalización de las pymes]
No obstante, el presidente considera que la innovación es un desafío público-privado. «Destinar solo un 1,2% de inversión del PIB a la I+D+i es algo que debemos corregir. Las empresas del IBEX están haciendo su revolución industrial. Las pymes deben seguir el mismo camino y el gobierno también debe implicarse más». Unas palabras en las que Pedro Mier ha coincidido y añadido que «los grandes avances tecnológicos nos permiten ahora no solo hablar de digitalización en las empresas, sino también en tomar decisiones para lograrla».