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Cosentino

Gran empresa vs emprendedores: la sostenibilidad, más allá de plantar árboles

Ilunion y Retree participan en la presentación del 'Anuario de la Innovación en España 2023', en Madrid Innovation Lab
sostenibilidad anuario
A un lado, Ana Uruñuela, directora de Desarrollo Corporativo e Innovación en Ilunion; al otro, Pedro Pérez de Ayala, fundador y CEO de ReTree. (Imagen: Ilunion)

La presentación del 'Anuario de la Innovación en España 2023’ también tuvo espacio para el emprendimiento, la gran empresa y también el papel de la sostenibilidad en el ecosistema innovador español. La sostenibilidad, aunque sea un eje transversal, se puede aplicar o no. La cuestión es que se haga bien. 

Ilunion, en ese sentido, es todo un ejemplo. Ana Uruñuela, directora de Desarrollo Corporativo e Innovación en Ilunion, aseguró que la innovación es una carrera de fondo. “Todos tenemos claro que la innovación es conseguir, por un lado, metas nuevas o territorios donde antes no llegábamos, o por otro lado, hacer cosas distintas a como lo hacíamos antes y que salvemos situaciones que no eran sostenibles”, declaró. 

Según ella, son conscientes de que no importa cuanto se consigue, sino cómo se consigue o durante cuánto tiempo se podrá hacer bien. “Una manera más o menos clara es que todos cuidamos nuestros resultados y aceptamos impactos de manera reactiva o productiva. No todos tenemos el mismo nivel de productividad, pero el cambio constante es irrenunciable, tenemos que estar en una reinvención perpetuar. Y la innovación debe ser sostenible; al final, innovas o mueres”. 

Por otro lado, inició un debate interesante ya que planteó que la la rentabilidad económica y social es compatible. De hecho, Ilunion es un ejemplo de ello, pues es referencia y además es competitiva. “Demostramos que colectivos vulnerables puede tener negocios rentables y no vemos otra forma que poner a las personas en el centro. Contamos con 37.000 trabajadores de los que el 42% son personas con discapacidad. 

“Hace muchos años demostramos que era posible tener personas con discapacidad y convencer. ‘Si nosotros somos capaces, demostraremos que es posible y contagiaremos a la sociedad’, pensábamos. El impulso no lo contamos, y cada año estamos cada vez mas de moda, antes no era así. Nos hemos visto representados en ese cambio necesario, en esa ‘empresa diferente’. Porque, al final, las personas siempre estarán”, argumento Uruñuela. 

Asimismo, también indicó que tienen asumido desde hace tiempo que hay que colaborar en distintos ámbitos: innovación abierta, intraemprendimiento… “Nos relacionamos, hacemos alianzas, colaboraciones, tenemos relación con la administración pública -que tiene una mera muy diferente de funcionar-… pero la relación con las startups es lo que ha cambiado”. 

“Si una empresa pone límites, empiezan los miedos”

Uruñuela estuvo acompañada en la mesa informativa del Anuario de la Innovación por Pedro Pérez de Ayala, fundador y CEO de ReTree, un proyecto de compensación de CO2 a través de la reforestación -“aunque no tiramos unas semillas y nos vamos, esto ya lo hace la naturaleza”, puntualizó-. Para él, sobre el solitario camino del emprendedor -al menos, como tradicionalmente se ha visto desde fuera- se debe hacer buscando respuestas. Pérez de Ayala, que tiene un equipo de ocho personas, siempre les dice que, si las cosas se han hecho siempre así, hay que cambiarlo.

“Hay que ser un poco sensores, sensores de buscar la oportunidad. A lo mejor no se sabe la solución, pero ya se encontrará. También aconsejaría, sobre este camino, hablar con la pareja, padres, hermanos, amigos y avisar que ‘se te va a ir la olla’ y vas a dejar de hacer planes, olvidarás cumpleaños… Hay que poner sobre aviso porque se necesitará mucho apoyo”, afirmó. Esa es la primera parte. La segunda red de apoyo, para ReTree, fueron Enisa y B Corp. “Fue una maravilla, un cambio enorme. Gracias a eso fiché a mi equipo, amigos a los que pago en definitiva. 

Pérez de Ayala también recordó que muchas personas, emprendedores jóvenes, creen que la empresa es el diablo, contaminan, toman decisiones explotadores y demás clichés. Pero la realidad es que son necesarias y muchas veces han ido por delante en lo que se demandaba en cuanto a sostenibilidad. 

“Lo que veo es que el 99,9% de las empresas se han subido a este carro sostenible y falta gente formada para dirigirlo. El director de sosteniblidad tiene que ser un trabajador toda la vida. Y no, porque no sabe. Da vértigo poner a alguien joven en este área, pero se puede poner un mentor… Igual que aplaudo que se apueste por la sostenibilidad, que internamente lo haga gente que sepa. Los procesos para crear un proyecto arranca con muchas reuniones, concienciación, consultaría. Esto no va de plantar y publicar en redes sociales, es algo serio, pongamos a gente con talento. Si una empresa pone límites, empiezan los miedos. Y con miedo no se innova”, razonó.

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