Una combinación de lo clásico con lo digital; de la cocina con la gestión; del arte con la técnica. Así podría resumirse la filosofía de Barcelona Culinary Hub, escuela superior de gastronomía que busca ser el primer campus culinario de la ciudad capaz de reunir las exigencias gastronómicas actuales. "Nuestro sector está en constante cambio. Hay una cantidad importante de negocios culinarios que no superan el año de vida por cuestiones relacionadas con la gestión, la promoción o incluso la gestión interna del equipo. Nuestra misión es que los futuros profesionales no tengan que recurrir a externos y sepan autogestionar su negocio", explica a Innovaspain Sergi Terraza, director general de la escuela.
El proyecto, impulsado por Planeta Formación y diferentes universidades gastronómicas, tiene el objetivo de profesionalizar el sector en el ámbito más general –desde la restauración hasta los últimos avances tecnológicos en producción agrícola– aplicando conceptos y técnicas de management para el desarrollo y viabilidad de futuros negocios. "Encontramos un consumidor exigente, formado y con un paladar exquisito. Los profesionales deben estar preparados para este cambio continuo. Y solo pueden lograrlo siendo rápidos, innovadores, disruptores y disponer de las técnicas necesarias para cualquier problema repentino", asegura Terraza.
Por el momento, Barcelona Culinary Hub ofrece en total ocho programas online de tres meses de duración dentro de su iniciativa 'Gastro Solutions'. La escuela define esta opción como una herramienta de formación efectiva para que los profesionales del sector puedan abordar los retos que tienen por delante ante la situación actual. "Combinamos un nuevo concepto de formación adaptado a la situación actual de la pandemia", apunta Terraza, para quien la innovación y la sostenibilidad son la clave del éxito de la escuela.
Barcelona Culinary Hub cubre dos fases: en esta primera dispone de un catálogo de formaciones de especialización y masters en modalidad online. "En la segunda contaremos con un centro físico, donde nos centraremos más en el producto, la cocina y todo lo que implica la práctica y el uso de materiales técnicos para el propio desarrollo", avanza el director general.
Barcelona forma parte de la identidad de la escuela como referente internacional culinario –es la cuna de grandes chefs como Ferran Adrià, los hermanos Roca o Xavier Pellicer, entre muchos otros–. "Creímos en la marca Barcelona como buque insignia de la dieta mediterránea, además de ofrecer gran diversidad culinaria y una amplia oferta gastronómica", cuenta Terraza. Por el momento, Barcelona Culinary Hub convive con el formato multifuncional (online y presencial). Conceptos como el Slow Food, el Kilómetro 0 y el respeto por la cultura agroalimentaria de las regiones es la columna vertebral de su oferta.
"Observamos un fuerte enfoque en la digitalización del sector. También ha adquirido mayor importancia las redes sociales, el desarrollo de apps y canales directos para llegar al público potencial, que cada vez más se encuentra conectado con el entorno digital", añade el responsable. Al mismo tiempo, Barcelona Culinary Hub es consciente de que cada vez se valora más el producto de proximidad, el respeto por el sector agroalimentario y los productos ecológicos.
"Se apuesta por alimentos y procesos que evitan el uso de químicos y el sobre tratamiento de éstos. A nivel gastronómico la cultura va a ser más viva que nunca. En una época donde la sociedad siente mucha nostalgia, las recetas que nos causan este sentimiento se encuentran más avivadas que nunca", concluye.
