2017 fue un buen año para Telefónica Open Future_ . Además de incrementarse la relación con las compañías invertidas por Telefónica para ampliar la cartera de servicios al cliente o para uso ‘interno’ (120 startups colaboran con la operadora), tuvieron lugar nuevas inversiones a través de Wayra, Amerigo (en KDPOF, Aerial, y Vilynx) y Telefónica Ventures. En paralelo, OF_ vivió el pasado año varios ‘exits’, o bien por ventas a terceros, como ha sido el caso de Upplication (invertida por Wayra), Review Pro y Mindmeld (de los fondos Amérigo) o por salidas a Bolsa como la de Quantenna (Telefónica Ventures).
Blaca Drake, Business Office Director de Telefónica Open Future_, considera que 2018 tiene que ser el año en el que el crecimiento y desarrollo de OF_ conviva con la cohesión de las líneas de trabajo abiertas en diferentes iniciativas.
En lo que a aceleración se refiere, con 11 academias Wayra y más de 60 espacios de crowdworking abiertos en 16 países, Drake explica que ahora el reto pasa por ser capaces, “junto a nuestros partners”, de mantener el foco y de “seguir como referente para todos aquellos emprendedores tecnológicos cuyas ideas y soluciones puedan ser de utilidad a Telefónica, tanto internamente como para sus clientes”. “2018", añade, "tiene que ser un año de consolidación de esta red y de redefinición de nuestra propuesta de valor una vez que los ecosistemas en los que estamos presentes son cada vez más maduros y las necesidades de las startups que forman parte de ellos también van cambiando”.
Cambios que en buen medida vendrán de la mano de tecnologías que se consolidarán en el corto plazo. Un abanico de nuevas posibilidades entre las que Drake destaca el blockchain, “sin duda la que más expectación ha levantado” y sobre la que “aún se están probando distintas soluciones, aunque estamos seguros de que, aquella que sea la primera en aportar un valor claro a una industria, va a desencadenar un importante movimiento en cascada a partir de esta tecnología”.
Drake también resalta el papel del Cloud Computing, “que está abriendo nuevas posibilidades en campos como la IoT, el Gaming o la Realidad Virtual que requieren tiempo real o que la latencia sea muy baja y que esté garantizada, cosa difícil de conseguir cuando las aplicaciones se encuentran a cientos o miles de kilómetros de distancia”. Por otro lado el desarrollo del 5G y la virtualización de las redes “también resultan fundamentales”, así como todo lo relacionado con “IoT, Inteligencia Artificial, Aprendizaje Automático, Ciberseguridad, la mejora de Experiencia de Cliente o el Análisis de Big Data”.
El nuevo emprendedor
En sólo 6 años, el equipo de OF_ ha sido testigo de cómo el apoyo al emprendimiento ha pasado “de la nada” a que todas las industrias impulsen su propia aceleradora. Un tiempo que ha configurado un emprendedor más maduro “que está aprendiendo a hacer las cosas y que no siempre necesita un acompañamiento en su crecimiento, por lo que nosotros también estamos evolucionando nuestra oferta hacia ellos para adaptarnos a sus necesidades y a las del mercado”, explica Drake.
Tras lograr cubrir todas las etapas de desarrollo de estos jóvenes empresarios gracias a iniciativas específicas, en OF_ buscan ahora que esa relación no responda necesariamente a este esquema, “que no esté tan encorsetada” y que, por ejemplo, "Wayra invierta directamente en una startup de un tamaño medio, mayor que en las que habitualmente tiene puesto el foco y que considere que tiene interés, aunque esa startup no vaya a ser acelerada”. Drake añade que, por otro lado, “ya no basta con ofrecer financiación, mentorización…; ahora ese plus está más allá, como por ejemplo en la posibilidad real de internacionalización o de que su solución forme parte de una cartera de servicios accesible a los clientes de Telefónica”.
Vocaciones STEAM y emprendimiento femenino
Hace dos años, en Open Future_ decidieron plantearse cuál era la aportación concreta de la mujer al emprendimiento tecnológico. Cuantificaron las startups de su red que tenían como CEO a una mujer, o cuántas de éstas formaban parte de su equipo fundador, y “lamentablemente”, el número era muy bajo.
En tres mercados como el estadounidense, el latinoamericano y el europeo, el ratio de CEO mujeres era inferior al 5%, y en el caso de startups con presencia femenina en el comité de dirección, este ratio estaba por debajo del 20%. “Esta situación nos pareció grave, tanto a nivel social como para la propia salud de nuestro ecosistema, y decidimos tomar medidas”, explica Drake sobre el origen de Women’s Age, y añade que la puesta en marcha de la iniciativa “no es buenismo”, sino una decisión de negocio ya que “la diversidad es una fuente de talento y una ventaja competitiva que lleva a las startups a tener mejores resultados”.
Women´s Age trabaja en propuestas concretas que fomentan el interés de las niñas en carreras técnicas y de ciencias, impulsa vocaciones en el ámbito universitario, tiene planes de formación entre mujeres sobre cuestiones de liderazgo y destrezas digitales y apoya a mujeres que ya han emprendido, “dando visibilidad a su trabajo para que sirva de referente a otras mujeres, haciendo networking y empujando con ellas en aquellas áreas donde necesitan más refuerzo”.
Según Blanca Drake, aunque este último año ha sido importante para la mujer desde el punto de vista reivindicativo, “no nos podemos quedar ahí, tenemos que aprovechar este empuje para concretarlo en hechos”.