Blocknitive y Enviroscale se han unido para ofrecer un proyecto que, aseguran, no se está trabajando en ningún otro lugar del mundo. Se trata del concepto Blockchainergy, que sirve para aplicar los últimos avances en blockchain al sector energético, por lo que se podrá medir y cuantificar por primera vez el nivel de sostenibilidad de la energía.
Se trata de un software de tecnología inteligente que permite rastrear y recabar datos sobre las plantas en las que se produce la energía y los puntos a los que se distribuye, monitorizando todo el proceso y certificando el origen de la energía que se está consumiendo.
O, como explica la propia CEO de Enviroscale, Meritxell Pérez de Castro-Acuña, lo que han hecho es “sumar el talento y la innovación con la necesidad de proporcionar información acerca de la sostenibilidad de la energía que se genera”. Y es que, para ella, el concepto sostenibilidad, en muchas ocasiones, se entiende todavía sesgadamente.
De ahí que este proyecto “proporcione trazabilidad, visibilidad e inmutabilidad, además de estar basado en estándares de compromiso medioambiental” que evitan el greenwashing que se ha podido producir en los últimos años con mediciones sesgadas. “Queremos proporcionar eso al consumidor final y empresas”.
Según Pérez de Castro-Acuña, en la sociedad existe un “mal entendimiento de la energía renovable”. Indica que muchas comercializadores dicen que ofrecen energía verde cuando lo que venden es renovable, pero no sostenible, que no es lo mismo. “Queremos diferenciar eso a través de criterios medibles y estándares para que la sociedad tenga un conocimiento más claro de la energía que está consumiendo. Por otra parte, que constituya a su vez un efecto tractor para tener un proyecto más sostenible. Es una necesidad real la de aumentar el conocimiento energético”.
Blockchainergy, más allá del blockchain
Como indica, por su parte, Miguel Peco Perea, director de Desarrollo de Negocios de Blocknitive, el blockchain es, a priori, algo muy sencillo: “Es una base de datos donde cada vez que metemos información hay muchos ordenadores que la recogen. Con ello, se le da veracidad e inmutabilidad mientras nos alimentamos con sistemas de información como IoT u otros sistemas para generar esa confianza al mercado”.
En Blockchainergy, Blocknitive lleva la parte tecnológica, la aplicación. “Utilizamos una red blockchain, pero la complejidad está en conectar los smart contract con la red, automatizando los procesos. Intentamos que el cliente no vea esa parte, que no le resulte complejo. Al final, todos los distintos hitos puedan tener visibilidad y en tiempo real”.
Además, explica por qué este proyecto es pionero y por qué no se ha hecho en ninguna otra parte del mundo, además de España: “Es una tecnología que no se ha hecho antes porque el blockchain tiene un periodo de comprensión. Una de las principales diferencias, además de la inmutabilidad es el tiempo real. Tiene una usabilidad para clientes muy sencilla para que lo puedan solucionar sin necesidad sin tener conocimiento. Hemos imitado lo que haría tecnología blockchain de forma sencilla para que todos puedan colaborar en el proceso”.
Asimismo, Pérez de Castro-Acuña añade sobre el funcionamiento que “un productor se da de alta en la plataforma, cumplimenta la información en cuanto a los indicadores y obtiene un scoring. A través de su comercializadora, ese scoring forma parte de la factura de la luz y a través de un código QR ve de qué plantas procede y como se ha llevado a cabo esa sostenibilidad”.
Por último, insiste en que lo que hacen es incorporar estándares de sostenibilidad que todavía no se habían adaptado de una forma amplia y vincularlo con la tecnología blockchain. Es cierto que se ha adaptado a muchos sectores, a muchos negocios, pero en energía no se ha utilizado nunca para medir la trazabilidad. “De forma separada, no nos inventamos nada, ni blockchain, ni nada, ni sostenibilidad. Está todo trabajado bajo estándares en los que nos basamos: nosotros lo vinculamos como un todo en uno”.