Bosch ha presentado en el VEM (Vehículo Eléctrico de Madrid) sus últimos servicios y productos dirigidos a facilitar los servicios de recarga de los vehículos eléctricos y la interoperabilidad de la infraestructura de recarga. El objetivo de la empresa es lograr que la electromovilidad sea cada vez más sencilla y accesible para todos, y los smartphones están jugando un papel clave, ya que permiten a los conductores encontrar los puntos de recarga de manera fácil.
Ejemplo de ello es que cerca de 3.700 puntos de recarga pública en Alemania han sido ya habilitados a través de internet con aplicaciones que ha desarrollado la compañía, actualmente disponibles para las marcas Smart y Mercedes-Benz y próximamente para Renault. Los fabricantes de coches están utilizando estas apps con el fin de facilitar las recargas de sus clientes de automóviles eléctricos y agilizar el avance hacia el modelo sostenible. De su aplicación en España ha hablado Fernando Moreno, responsable de Movilidad Eléctrica de Bosch, que asegura que “para dar el salto al modelo eléctrico es fundamental la unión entre el Internet de las Cosas y la electromovilidad”.
Además de los diferentes proyectos de movilidad eléctrica y de su participación en el organismo de normalización eMI3, Bosch forma parte de la plataforma para el operador de eRoaming Hubject GmbH de Berlín, que facilita la recarga de vehículos eléctricos entre diferentes gestores de carga. “Estamos trabajando en seguir mejorando las gestiones de recarga en remoto para que el usuario conozca en cada momento dónde están geolocalizados los puntos de recarga y su estado”.
Entre los principales objetivos del eRoaming se encuentra el facilitar los viajes largos, de una ciudad a otra, ya que hasta el momento cada gestor de cargas opera su red de puntos de recarga bajo su propio sistema informático sin tener en cuenta al resto. Con esta iniciativa, Bosch pretende extender la movilidad eléctrica y “generar nuevos modelos de negocio en torno al vehículo eléctrico más allá de los puntos de recarga”, así como “reducir hasta en un 20% las emisiones contaminantes, el ruido y el tráfico de cara a 2020”.