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El BSC da a conocer el tercer supercomputador más rápido de Europa

BSC MareNostrum

El Barcelona Supercomputing Center ha puesto en producción, desde el pasado sábado, su nuevo superordenador MareNostrum, el cuarto de una línea dedicada exclusivamente a la generación de conocimiento científico. El Ministerio de Economía, Industria y Competitividad ha sido el ente institucional que ha financiado la adquisición del supercomputador, cuya instalación ha tenido un coste total de 34 millones de euros.

Una inversión para ciencia que contará con una capacidad de 11,1 petaflops, es decir, que el MareNostrum 4 es capaz de realizar 11.100 billones de operaciones por segundo, además de tener una memoria central de 390 terabytes (390.000 gigabytes) y está conectado a unos racks de almacenamiento con capacidad para guardar 14 petabytes (14 millones de gigabytes) de datos. Y es que, según el célebre ránking Top500 (publicado el pasado 19 de junio), especializados en analizar la rapidez de estas máquinas a través de un programa llamado linpack, el clúster de propósito general de este superordenador “es el tercero más rápido de Europa y el decimotercero del mundo”.

Y esto es solo la capacidad de su clúster principal, ya que, según el BSC, este será ampliado con la instalación de tres nuevos clústeres, con tecnologías emergentes y de menor tamaño, durante los próximos meses. Así, estos 11,1 petaflops suponen una potencia diez veces superior a la que tenía MareNostrum 3, que se instaló entre 2012 y 2013.

Pero, ¿para qué tanta capacidad? ¿Qué es lo que hacen exactamente estos superordenadores? “Los superordenadores son útiles para la investigación básica y aplicada por su capacidad de realizar grandes cálculos, ejecutar grandes simulaciones y analizar grandes cantidades de datos”, explican desde el BSC. De todos modos, hoy en día son utilizados prácticamente “por todas las disciplinas científicas, desde la astrofísica o la física de materiales, pasando por la biomedicina, y también por la ingeniería y por la industria”. Anuncian también que entre los proyectos que ejecutará MareNostrum 4 durante su primer cuatrimestre de producción, se incluirán investigaciones sobre el cambio climático, las ondas gravitacionales, la vacuna contra el sida, nuevas terapias de radiación contra el cáncer y simulaciones sobre la producción de la energía de fusión, entre otros.