Buddy el robot. Ese es el nombre del personaje de dibujos animados virtual potenciado por inteligencia artificial galardonado con el Premio South Summit a la ‘Startup con mejor solución tecnológica para el aprendizaje y formación’. La app, disponible en iOS y Play Store, ya ha sido descargada por más de tres millones de familias. Y es que está pensado para que los niños se comuniquen con él y así practicar el inglés.
Desde Estados Unidos, el cofundador y director de operaciones del proyecto Buddy.ai, Dmitry Staviski, expresa a Innovaspain su alegría por el premio. “Lo tomamos como una clara señal de que la tecnología de los profesores virtuales como Buddy.ai, que hasta hace poco se consideraba puramente de ciencia ficción, está finalmente tomando su lugar como parte esencial del horizonte educativo”.
La clave no es otra que amenizar el aprendizaje. “Las lecciones de Buddy parecen minijuegos divertidos, y los niños perciben al robot como un compañero de juego”, explica Straviski. El COO asegura que los padres “aprecian” que sus hijos puedan tener este tutor personal. Una relación entre niños y robot que ha aumentado a causa de la pandemia de la Covid-19.
De hecho, solo durante el comienzo de la pandemia hasta 400.000 pequeños hicieron un minicurso gratuito con Buddy sobre salud.
Aparte del proyecto estadounidense, otras cuatro startups fueron ganadoras en las diferentes categorías. Estas fueron Edusynch, Premio IE University a la ‘Mejor startup en educación superior’. El Premio Wayra a la ‘Startup con mayor escalabilidad´ fue para Genially. TOMi, Premio Fundación Santillana a la ´Startup con mayor impacto social en educación´. Por último, la empresa Korbit se llevó el Premio Fundación Telefónica a la ‘Startup con la mejor solución durante la COVID-19´.
El enlightED Virtual Edition 2020, en su tercera edición, estuvo organizado por la Fundación Telefónica, IE University, Fundación Santillana y South Summit.
El robot que no para de aprender gracias a la IA
Las capacidades de Buddy siguen aumentando cada día. Actualmente, cuenta Staviski, este robot puede enseñar a los principiantes “vocabulario hablado, comprensión auditiva, y algunos aspectos de la producción del lenguaje”. Aunque advierte que dentro de poco será capaz de enseñar otras habilidades lingüísticas, como la pronunciación y un abanico de situaciones de conversación.
“Buddy crecerá con sus estudiantes y les permitirá practicar el inglés tanto como necesiten, y de una manera divertida. También aprenderá a trabajar en tándem con profesores humanos. El tutor virtual se encargará de la mayoría de las tareas de enseñanza cotidianas. Eso dejará más tiempo a los profesores para que puedan centrarse en “guiar y motivar a los estudiantes, ayudarles con problemas difíciles, enseñarles empatía y habilidades de comunicación”.
Una idea que encaja a la perfección en el imaginario del sueño americano. Tres fundadores y parte del equipo de Buddy.ai aprendieron inglés como lengua extranjera, se sincera Staviski. “Además, la mayoría de nosotros somos padres de niños que han aprendido o están aprendiendo inglés. Así que sabemos de primera mano lo difícil que es dominarlo”.
Facilitar el acceso a tutorías virtuales y hacerlo de una manera divertida. Ante un público potencial de 500 millones de estudiantes “que no están inmersos en el ambiente del idioma inglés y no tienen acceso a tutorías individuales, para los que es especialmente difícil aprender el idioma”.
De ahí surgió la idea para el equipo de ingenieros y emprendedores que compone la startup. El objetivo era claro: “ayudar a todos estos estudiantes a aprender inglés. A través de la construcción de un tutor virtual que sea asequible y esté disponible para practicar el inglés en cualquier lugar y en cualquier momento”.