La Comunidad de Regantes Canal de Aragón y Cataluña —más conocida como el Canal de Aragón y Cataluña— ha reducido en un 15% su consumo de agua. No es baladí: este canal, con una antigüedad de 120 años y una longitud de infraestructura de 300 kilómetros, actualmente abastece a 49 poblaciones. Para ello, han contado con la colaboración de Siemens, que les ha ayudado con su proceso de digitalización gracias, entre otras cosas, a un moderno centro de control que detecta inmediatamente las incidencias y reduce los tiempos de respuesta.
En el momento de máxima demanda, se suministra por el Canal un caudal de 50 metros cúbicos por segundo, lo cual totaliza al año unos 500 hectómetros cúbicos de consumo de agua, que es equivalente al consumo de una gran ciudad como, por ejemplo. Madrid.
Además del consumo urbano, suministra agua para regadío para una superficie de más de 100.000 hectáreas y 129 comunidades de regantes de base que la distribuyen para el usuario final. Y el consumo de agua de regadío se complementa con el consumo de agua para granjas, para ganadería y alimenta también a la agroindustria; y, fruto de todo esto, es que el complejo agroalimentario de la zona regable es el complejo agroalimentario número uno de este país.
Así, hasta el momento, los sistemas de distribución en zonas de regadío en España no estaban automatizados, ni tenían transparencia de datos.
«Para ello, la gestión de infraestructura a tiempo real en un moderno centro de control conectado con dispositivos móviles es absolutamente imprescindible. Nuestro principal reto es detectar inmediatamente las incidencias, reduciendo los tiempos de respuesta y mejorando la gestión de caudales de forma segura y transparente. Necesitábamos una actualización del sistema de control del Canal y, para ello, la tecnología de digitalización de Siemens era la herramienta ideal en la que apoyarnos», destaca Roberto Quintilla, director de Explotación del Canal.
El papel de Siemens
Por otra parte, según César Fernández, Business development W&WW en Siemens, hasta ahora, en España, los sistemas de distribución en zonas de regadío no estaban automatizados ni tenían trasparencia de datos. El Canal ha sido pionero en implementar un estándar con la plataforma TIA portal. Paralelamente, se han instalado dos centros de control interoperables en Monzón y Binéfar con el objetivo de dar cobertura a las cinco zonas de gestión en las que se distribuye el Canal.
«Los operarios de campo cuentan con treinta dispositivos móviles tipo tablet para acceder a la aplicación desde cualquier sitio y en cualquier situación. Así es como se facilita la toma de decisiones en tiempo real», cuenta Fernández. «Desde el SCADA del centro de control, basado en WinCC V 8, se pueden geolocalizar las tomas y notificar cualquier incidencia a través de mensajes, gracias a la tecnología de Siemens».
Asimismo, Lydia González, Product Manager de Telecontrol en Siemens, señala que el Canal cuenta con 350 tomas distribuidas a lo largo de su red. Necesitaba poder monitorizarlas y gestionarlas en un único centro de control. Así que la solución de Siemens fue instalar su sistema Telecontrol Server Basic, que permite conectar todas estas tomas a través de redes móviles como el 4G o el 5G, a una sola instalación central donde recolectar toda esa información.
«Con el uso de este sistema de telecontrol, se optimizan las redes móviles, enviando solamente información relevante para el proceso, como el caudal o el nivel del agua. Además, se logra una completa trazabilidad de los datos en caso de pérdida de comunicación con las tomas. El búfer del módulo de comunicaciones almacena esta información durante el periodo de tiempo y lo envía con fecha y hora de origen en el momento en el que se recupere la conectividad, cumpliendo así uno de los objetivos prioritarios del Canal», especifica la experta.
Un modelo de IA
Con todas estas tecnologías, integradas en su partner Dcontrol, el Canal de Aragón y Cataluña ahorra hasta un 75% de ingeniería gracias a la estandarización, mediante el uso de librerías. Al mismo tiempo, reduce el ya mencionado 15% de consumo de agua, su bien más preciado, ya que ahora disponen de datos en tiempo real, que permiten realizar maniobras en cualquier punto de nuestra instalación a cualquier hora del día.
Con la información que recogen, entrenan también un modelo de inteligencia artificial y son capaces de gestionar la demanda de agua solicitada de un modo más eficiente. También reducen los tiempos de trabajo y errores, ya que sustituyen la toma manual de datos en campo por un proceso automatizado.