La Comunidad de Madrid cuenta actualmente con 8.600 empresas tecnológicas que suponen 93.000 empleos, el 35% del total. Con estas cifras sobre la mesa, el Canal de Isabel II ha presentado su estrategia de I+D+i para los próximos 4 años. Un plan que tiene como objetivo final "posicionar a la Comunidad de Madrid como referente para la investigación e innovación a nivel internacional", según ha destacado Rafael Prieto, director general del Canal.
Prieto ha repasado el mapa mundial de la innovación, un proceso cada vez "más amplio, que afecta a toda la cadena de producción" y permite a las empresas ser más competitivas. Una carrera, la de la I+D+i, encabezada por el continente asiático, si bien Europa "no tiene por qué bajar la cabeza" y evoluciona "hacia una economía cada vez más digital". Por su parte, España está considerada como un innovador moderado si bien, está realidad no se corresponde "para nada" con el potencial de nuestro país.
Y dentro de España, el director general del Canal de Isabel II ha destacado el potencial de la Comunidad de Madrid, que ha destinado 484 millones de euros a la innovación y tiene como objetivo destinar el 2% del PIB regional a la I+D+i. En este contexto es en el que se enmarca, ha afirmado, la nueva estrategia de innovación del Canal hasta 2020. Un documento que, basado en siete puntos o retos estratégicos, quiere convertir Madrid en referencia de innovación en el ciclo integral del agua.
Francisco Cubillo, subdirector I+D+i del Canal, ha destacado que la clave de la innovación es plantearla siempre con "un horizonte largo y una perspectiva amplia", pensando en el ciudadano como beneficiario de la I+D+i. En este sentido, ha destacado que los principios sobre los que se ha construido esta estrategia son "avanzar con el claro objetivo de mejorar, aprender para compartir, comunicar para implicar, colaborar para optimizar, juntar ideas para que surjan ideas, comprobar para corregir y explorar para avanzar".
Asimismo, Cubillo ha declarado que algunos de los retos estratégicos que aborda este plan pasan por fomentar una cultura innovadora, cuidar al cliente, reforzar el posicionamiento y buscar una mayor eficiencia y sostenibilidad. Finalmente, en cuanto a las líneas prioritarias de investigación para el Canal de Isabel II, Cubillo ha destacado la planificación y la gestión eficiente de las infraestructuras; una mejor gestión de la demandada usando para ello herramientas de predicción; incorporar el riesgo, la resiliencia y la participación para mejorar la calidad del servicio; o proteger las masas de agua frente a posibles impactos por acciones de saneamiento y drenaje. Todo ello, para garantizar "la calidad el agua para cada usuario".
Robótica 3D y de código abierto
La nueva estrategia de I+D+i del Canal de Isabel II se ha presentado en el contexto de un Innovation Day en la que expertos en este ámbito han analizado y debatido sobre las mejores estrategias y las corrientes más novedosas dentro de la innovación del siglo XXI. Además, la jornada también ha contado con InMoov, el primer robot de tamaño natural impreso íntegramente en 3D y de código abierto.
Su creador, Gael Langevin, ha señalado a la robótica como claro ejemplo de innovación que avanza de la mano de otras nuevas tecnologías como la impresión 3D o la inteligencia artificial. En este sentido, ha valorado que los robots están llegando cada vez con más fuerza y que "en 10 o 15 años" ya podrían ser autónomos. Asimismo, ha puesto en valor que InMoov se haya realizado con código abierto porque eso significa "que cualquiera puede ayudar a mejorarlo". De hecho, en su opinión, la inteligencia artificial debe pasar por el 'open source' más que por avances hechos en exclusiva por una compañía. Así, ha enfatizado, se podrá avanzar más rápidamente y con un coste más bajo, poniendo como ejemplo, los 1500 euros en total que ha costado crear InMoov.