Cantabria como referente en innovación para vehículos híbridos

La colaboración entre el Centro Tecnológico CTC y la empresa SEG Automotive posiciona a la región como un importante impulsor en tecnología rentable y respetuosa con el medio ambiente en el sector automoción
híbridos

El CTC es el único centro tecnológico de Cantabria; SEG Automotive, una de las compañías con más historia de España en la innovación de motores y alternadores –desde 1942 los fabrican en Treto–. De la colaboración de ambas ha surgido el que probablemente sea uno de los hitos más importantes en el ámbito de la conducción híbrida: una resina que mejora la resistencia de las piezas metálicas a la corrosión galvánica.

Esta solución tecnológica, que emplea nanotecnología para optimizar las prestaciones del recubrimiento convencional, permitirá a SEG Automotive fabricar un nuevo alternador híbrido de impulso y recuperación. El principal valor de esta innovación es que será un componente resistente ante un fenómeno crítico. El dispositivo, que pertenece a la segunda generación de la gama de producto Boost Recuperation Machine (BRM – GEN2), sitúa a la factoría cántabra ante un escenario óptimo para posicionarse como líder europeo en la fabricación de sistemas híbridos para la industria automotriz

El proyecto aspira a resolver los retos tecnológicos derivados del incremento de voltaje necesario para producir alternadores y motores para vehículos híbridos. En los alternadores convencionales para turismos propulsados por combustibles fósiles, se trabajaba con una potencia eléctrica de 12V. En estas circunstancias, la resina empleada ofrecía la suficiente protección para garantizar unas condiciones óptimas de operación.

Sin embargo, los sistemas híbridos requieren voltajes de 48V para los que el modelo convencional no era suficiente. En este sentido, el equipo de Nanomateriales y Materiales Avanzados del CTC ha trabajado estrechamente con los responsables de la empresa para idear y producir una mejora mediante nanomateriales en la resina actual.

Beneficios del BRM

El BRM es capaz de recuperar energía en el frenado del vehículo y ofrece un aumento del rendimiento del motor al adelantar a otro vehículo o incluso al avanzar por inercia (conocido en el mundo del motor como 'planear') con el motor apagado. Este mecanismo de recuperación de energía transmite la corriente eléctrica a un alternador, que se encarga de almacenar la energía en un sistema de baterías. Debido a los elevados niveles de corriente que atraviesan tanto el alternador como el resto de elementos del BRM, la resina que protege la bobina de cobre del alternador frente a la corrosión galvánica se revela como un agente fundamental para garantizar el funcionamiento de este sistema.

Por otro lado, el dispositivo proporciona una reducción significativa en el consumo de combustible y de las emisiones de CO2 en condiciones de conducción habituales. Asimismo, permite el funcionamiento eléctrico de pequeños vehículos urbanos como las scooters o las motocicletas, minimizando aún más las emisiones contaminantes.

Especiales