Los investigadores del grupo de Cardiogenética de la Universidad de Murcia (UMU) y el Instituto Murciano de Investigación Biosanitaria (IMIB) María Sabater y Juan Ramón Gimeno han obtenido un millón de euros dentro de la convocatoria CaixaResearch para mejorar el diagnóstico y tratamiento de la miocardiopatía hipertrófica, una enfermedad cardiaca hereditaria que afecta a una de cada 500 personas.
Esta investigación, que se encuentra encuadrada dentro de un consorcio que lidera el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares Carlos III (CNIC) en el que también participa el Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL), se convierte en uno de los 33 proyectos de investigación biomédica y de salud seleccionados por la Fundación “la Caixa”. Las tres instituciones se encargarán en los próximos tres años de detectar nuevas causas genéticas asociadas a un engrosamiento del músculo cardíaco.
Miocardiopatía hipertrófica
Esta enfermedad genética hereditaria, relativamente frecuente, produce como consecuencia insuficiencia cardiaca y complicaciones arrítmicas. “Es conocida desde hace tiempo una serie de genes que albergan mutaciones que justifican el desarrollo de la enfermedad. A pesar de que el primer gen asociado se describió en 1990, en el 40 % de las familias con esta enfermedad no encontramos la causa genética cuando buscamos en los genes del sarcómero. Es decir, el problema no está en la estructura contráctil de las células cardiacas” resalta María Sabater, profesora del Departamento de Medicina Legal de la UMU.
Aunque disponemos de herramientas tecnológicas potentes para secuenciar los genes de una persona, siguen existiendo limitaciones en el análisis de los resultados que se obtienen. “La realidad es que los avances del diagnóstico genético en esta enfermedad se han estancado. No conseguimos identificar nuevos genes y no damos respuesta a un porcentaje importante de pacientes y familiares”, añade Juan Ramón Gimeno, del Departamento de Medicina Interna de la UMU.
Por todo ello, en esta ocasión proponen un enfoque novedoso. “Abordamos la búsqueda en todo el genoma, sin selección preconcebida de zonas candidata. Se trata de un estudio de secuenciación muy extenso y en profundidad, además del análisis posterior con ayuda de la inteligencia artificial y el modelado en cultivos celulares y animales de experimentación”, explica Sabater.
Para lograrlo se analizarán muestras de 10 familias numerosas, informativas, afectadas por la enfermedad en la Región de Murcia, identificadas por los investigadores de la UMU, que no presentan mutaciones en los genes sarcoméricos. El CNIC, por su parte, pondrá la experiencia y la tecnología para la realización de estudios de exomas, para el análisis e identificación de nuevas regiones genéticas y nuevos genes.
Medicina personalizada
El objetivo final del proyecto es profundizar en el conocimiento de las bases genéticas y de los mecanismos de producción de la miocardiopatía hipertrófica, con la idea de identificar dianas terapéuticas. “Estamos en la era de la medicina personalizada y es ahora más importante que nunca conocer las causas de la enfermedad para facilitar el desarrollo de tratamientos individualizados, en particular de las enfermedades de origen genético”, concluye Gimeno.
Actualmente están evaluando las familias candidatas en el Hospital Clínico Universitario Virgen de la Arrixaca y procesando las muestras en el Laboratorio de Cardiogenética del IMIB en el Campus de Ciencias de la Salud que dirige la profesora María Sabater.