Su padre ya inventó un sistema de tratamiento de aguas residuales, de cuyo desarrollo ella fue partícipe. Sin duda, fue algo que le marcó para el resto de la vida. “Siempre me fascinó un laboratorio que él tuvo en su modelamiento matemático del sistema, en Sao Paulo, a finales de la década de 80, que era mi lugar de sueños cuando niña”, afirma Carla Laucevicius. Años después, trasladados a Panamá, volverían a trabajar juntos en este mismo campo de investigación y el siguiente paso fue fundar su propia empresa Toth Research & Lab con el objetivo de “ser el centro de referencia en I+D ambiental para los desafíos del desarrollo sostenible y la seguridad hídrica”.
Desde que se creo la compañía, hace seis años, se han sucedido los premios. El último ha sido la elección de Carla Laucevicius como una de las Innovadores menores de 35 Centroamérica 2016 de MIT Technology Review en español. Ella define este reconocimiento como “el despertar de una pesadilla después de tanto tiempo perdido”. “Fueron tantos años de puertas cerradas, problemas tras problemas, que mi único objetivo era seguir adelante y no desistir –dice-. Si una puerta cierra, hay que dar la vuelta y encontrar otra puerta. Yo debo eso a mi, a mi hija y a mis padres, que siempre me apoyaron”.
Tal y como señalan desde el MIT, el cóctel bacteriano desarrollado por Carla Laucevicius, personalizado para Panamá, acaba con hasta el 90 por ciento de la grasa que se acumula en sus sistemas de agua residual urbana. Este producto biotecnológico para el manejo de aceites y grasas residuales de establecimientos de interés sanitario se denomina BioToth.
“Aislamos cepas locales, evaluamos las variables de impacto, hicimos bioensayo, sometimos las cepas a diversos modelos e identificamos los microorganismos más resistentes”, afirma. “Estos los multiplicamos y logramos, mediante ensayo científico, la reducción del 80 por ciento de la concentración inicial de los A&G comunes en las descargas sanitarias de la Ciudad de Panamá”.
El mundo de las bacterias
Su próximo objetivo es trabajar en otras presentaciones de BioToth “que permitan un manejo más sencillo, sin la necesidad de tanto control de bioseguridad en su aplicación”. Además, quiere lograr una comercialización más eficiente que le permita generar más ingresos para el laboratorio. Pero su mayor reto sigue siendo hacer de Toth Research & Lab “un centro de referencia en la región”.
Laucevicius defiende el potencial de las bacterias en la ciencia, a pesar de que se ha extendido en la sociedad la idea de que son malas, el concepto “cero gérmenes” y la obsesión por esterilizar todo. “La biotecnología aplicada tiene diversos usos, pero yo quiero centrarme en mitigar la contaminación”. “Actualmente estamos trabajando en un proyecto para encontrar e identificar microorganismos reductores de metales pesados en los manglares –continúa-. También queremos encontrar microorganismos que actúen en la degradación de plásticos contaminantes”.
La investigadora brasileña afincada en Panamá cree que, aunque la gente es consciente de que “corremos el riesgo de quedarnos sin agua”, aún no son conscientes de la verdadera dimensión del problema. “Principalmente en los países Latinoamericanos, donde el agua todavía está disponible y todavía cuenta con buena calidad en muchos puntos, no se toman los debidos cuidados. Me asusta que habiendo tantos ejemplos de fracasos en otros lugares del mundo, todavía utilicen las mismas tecnologías de mediados del siglo pasado y apuesten que con ellos será diferente. Se necesita muchos cambios”.
Brasil-Panamá
Cree que tanto su país de origen como su país de residencia “tienen grandes problemáticas, pero algo en común: la ‘solución’ se centraliza en la mano de pocos”. En su opinión, la mejoría de ambos vendrá a través de la política y la educación, “aumentando el acceso a los que quieren hacer algo serio basado en el conocimiento y el reconocimiento”.
“Brasil es muy grande, con una mentalidad más competitiva, ya que debes ser el mejor para lograr un buen trabajo y crecer profesionalmente. Panamá es mucho más chico, con pleno empleo o una tasa muy baja de desempleo, donde hay que ‘importar' talentos ya que existe cierta zona de confort en las masa laboral.