El foro Govtech 4 Impact World Congress (G4I 2024) ha iniciado este martes en La Nave de Madrid para repensar cómo puede la tecnología mejorar la relación de los gobiernos con los ciudadanos. Para uno de los ponentes, Carlos Santiso, responsable de la división de Gobierno Digital, Innovador y Abierto de la OCDE, “se necesita pasar de un gobierno digital a un gobierno inteligente, que apalanque lo digital y los datos para proveer servicios de mayor calidad, en torno a las necesidades de la gente”.
En su opinión, no se trata de digitalizar por digitalizar, sino de simplificar la vida de la gente. “La tecnología no es un fin en sí, es cómo la usas para mejorar tu eficiencia interna, tus trámites burocráticos”, explica Santiso en entrevista con Innovaspain, “que sea no solo digitalizar sino transformar la manera en que los gobiernos piensan y proveen servicios públicos a los ciudadanos”.
Tecnología al servicio de la gente
“Estamos en un punto de inflexión donde (los gobiernos) tienen que utilizar esta tecnología para realmente repensar cómo diseñan y proveen los servicios públicos en torno a la necesidad de la gente”, señala. Y añade que muchos de los datos que las administraciones tienen pueden mejorar su relación con los ciudadanos: “hacerla más ágil, más personalizada, más operativa y más integrada”.
La OCDE publicó recientemente el Índice de Gobierno Digital (GDI, en inglés) en el que mide si un gobierno utiliza lo digital y los datos para ser más inteligente. Países como Corea del Sur, Dinamarca, Reino Unido, encabezan la clasificación, mientras que España se sitúa en el puesto número 15, y Colombia destaca entre los diez primeros. De acuerdo con Santiso, países como Brasil y Perú han hecho muchos progresos en este aspecto.
Santiso, miembro del comité asesor sobre gobernanza pública de las Naciones Unidas y del Foro Económico Mundial sobre transformación digital y lucha contra la corrupción, considera que la inteligencia artificial puede contribuir a que los gobiernos entiendan, y anticipen, las necesidades de los ciudadanos. La IA “tiene que transformar los estados, y es una tecnología que podría permitir entender cuáles son las necesidades de la gente y anticiparlas de manera productiva para personalizar el servicio”, destaca.
Sin embargo, en países con economías desiguales, una gran parte de la población no genera los datos suficientes para ser capturados en sistemas automatizados, lo que genera un mayor riesgo de exclusión digital. Por ello, el experto señala la importancia de la identidad digital como palanca de inclusión, y tener acceso a servicios a los cuales las personas tienen derecho. De hecho, la OCDE publicó el año pasado una recomendación sobre ello.
Por último, Santiso destaca el papel del govtech para acelerar la innovación en el sector público. “Las startups pueden ser muy útiles para los gobiernos, para poder experimentar cosas de manera ágil y poder así incorporar innovaciones tecnológicas más rápidamente que lo suele hacer”, afirma.
Y señala casos de éxito de ciudades como Córdoba, Argentina, que permitió no solo acelerar la transformación digital de la Administración del municipio, sino también “promover el tejido empresarial innovador local”. El Fondo Córdoba Ciudad Inteligente es el primer fondo municipal de capital riesgo para inversión en govtech de Latinoamérica. Santiso destaca otros casos como el GovTechBizkaia y el GovTechLabMadrid, así como el de Monterrey, México.