La sabiduría popular dice que una buena sopa tiene el poder de resucitar a cualquiera. El caldo, curativo y reconstituyente, siempre fue un alimento imprescindible generación tras generación, pero los hábitos de la vida occidental le hicieron bajar en el escalafón de nuestra dieta habitual. María Goyanes y Beatriz Rakosnik, fundadoras de Cooldo, se han propuesto darle una segunda vida al caldo de huesos, mejorando si cabe la ‘receta’ ancestral. “Es más sano y más rico, no hay nada parecido en el mercado”, asegura a Innovaspain Beatriz Rakosnik durante el II Startup Day celebrado por Madrid Food Innovation Hub.
“Es hueso y solo hueso, no usamos carne. Añadimos cúrcuma, jengibre y vinagre de manzana. Lo cocinamos de modo que extraemos colágeno y aminoácidos (como prolina y glicina) mientras que los que encontramos en el supermercado suelen ser básicamente agua, con pocos nutrientes”, añade Rakosnik. La fórmula ayuda a nivel digestivo, articular e inmunitario. “No es un caldo al uso, sino que aporta una componente funcional”.
De hecho, el principio de la iniciativa tiene que ver con estas ventajas para la salud. “Soy nutricionista y María era una de mis pacientes. El caldo de huesos estaba incluido en una dieta que diseñé para ella. Pronto empezó a notar los beneficios, pero preparar un caldo así en casa es complejo y laborioso, así me planteó la posibilidad de llevarlo al mercado”.
Sostenibilidad
Aunque la idea empieza a tomar forma hace un año y medio, no es hasta marzo de 2023 que se produce el lanzamiento comercial de Cooldo. “Por el momento vendemos en la tienda online de nuestra web y en algún herbolario. Más adelante –sobre todo después de la reciente obtención del sello ecológico- nos gustaría entrar en más tiendas especializadas y, por qué no, en los espacios destinados a productos ecológicos de Carrefour o El Corte Inglés”, detalla Beatriz Rakosnik.
Los huesos con los que se elabora Cooldo proceden de animales criados en libertad en pastos españoles. Trabajan con ganaderos que practican una ganadería extensiva y son respetuosos con el bienestar animal. El producto es sostenible por dentro y por fuera, gracias al formato de tarro de cristal. María Goyanes apunta que fue en la cocina industrial de Madrid Food Innovation Hub donde terminaron de rematar la receta y optaron por el método del autoclavado como mejor opción, ya que prolonga hasta dos años la vida útil del producto, un distintivo frente a otras opciones que exigen conservación en frío.
Innovación
El proyecto va más allá del caldo, y las responsables de la startup ofrecen distintos packs nutricionales con los que modificar hábitos alimenticios nocivos. “Cooldo es la base de muchos de estos planes, pero el caldo por sí solo no puede lograr nada si no cambiamos otras cosas para llevar una vida más saludable”.
En el apartado de I+D, Cooldo trabaja junto al CNTA en el desarrollo de formato monodosis de caldo, para reducir el impacto medioambiental del transporte en agua y mejorar la experiencia del consumidor. “Serán pastillas o geles que podrán llevar donde quieran y que mezcladas en agua darán como resultado nuestro mejor caldo. Ejercerá como un sustituto perfecto del suplemento de colágeno y, no menos importante, como un alimento fuente de nutrientes en el día a día”.
La importancia del colágeno
El colágeno es la proteína más abundante en el cuerpo. Se encuentra en nuestra piel, así como en los tejidos conectivos como las articulaciones y los tendones. Mantiene unidos los huesos y los músculos, y mantiene el revestimiento del intestino.
Casi un tercio de nuestra masa total de proteína es colágeno. “También solía representar una parte relevante de nuestra dieta. En la actualidad no es así. Si a este hecho le sumamos que la síntesis de colágeno se ve reducida con la edad (sobre todo a partir de los 35), es importantísimo asegurarnos suficiente materia prima para mantener su producción. Además, en mujeres, la bajada de estrógenos en la menopausia reduce todavía más la síntesis de colágeno”, explican desde Cooldo
El caldo de huesos es una fuente natural de colágeno y contiene naturalmente los cofactores que ayudan a mantener el colágeno en el cuerpo.
