De la crisis social en Chile, a las protestas en Ecuador, Colombia y Bolivia, 2019 ha sido el año del estallido social en América Latina. Distintas situaciones que han sacudido a las empresas españolas. Un 67 % de estas cree que el entorno para sus inversiones en la región será negativo en 2020, mientras que el año pasado solo un 38 % compartía esa opinión. Esta es una de las conclusiones del XIII Informe Panorama de Inversión Española en Iberoamérica, una iniciativa conjunta del IE Business School, Llorente y Cuenca, Casa América e Iberia.
“Las empresas españolas piensan que 2020 no va a ser un año tan bueno como pensaban que iba a serlo en 2019, que luego tampoco lo fue”, explica Juan Carlos Martínez Lázaro. El 65 % de las compañías encuestadas aumentarán sus inversiones durante 2020, un porcentaje menor que el año pasado que fue de 76 %. “Perciben un peor clima económico y eso les lleva a ser más prudentes”, añade.
2019 ha sido un año de estancamiento para la región: hace poco más de un año el FMI pronosticaba que el crecimiento sería del 2 % pero fue en realidad del 0,1 %. Una situación que se explica, principalmente, por la guerra comercial entre Estados Unidos y China, los problemas del sector manufacturero en el mundo, el dólar que se ha mantenido fuerte y la crisis económica en Argentina.
La percepción sobre el desempeño que tendrán las diferentes economías ha empeorado de manera general. Chile ha descendido de la segunda a la novena posición, debido a la ola de protestas a la que se enfrenta el país desde mediados de octubre. Colombia vuelve a ser el país que gozará de una mejor situación económica en 2020, según las empresas españolas, seguido por Perú, Panamá, Costa Rica y República Dominicana.
México, el país más atractivo para la inversión española
Las expectativas sobre México disminuyen este año, debido al estancamiento en que se ha sumido el país durante el primer año del mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, el país seguirá siendo el lugar donde más piensan aumentar sus inversiones las empresas españolas. “Lo único que le falta a México es crecimiento”, puntualiza Martínez. El miedo que hubo en 2018 con la llegada al poder de López Obrador se disipó. “Hubo algunas decisiones que asustaron a los inversores, como el tema del aeropuerto (cuya construcción se canceló tras su llegada)”, señala Martínez Lázaro.
La firma del nuevo tratado comercial entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEX), que actualiza el NAFTA y que supone una de las principales victorias de Donald Trump, elimina parte de esta incertidumbre, asegura Martínez. Asimismo,el Tren Maya representa una oportunidad para las empresas españolas, OHL ya ha manifestado su interés de participar en su construcción.
Ciudad de México vuelve a ser por sexto año consecutivo, la ciudad más atractiva para que las compañías instalen sus operaciones centrales en la región, seguido, como en los dos últimos años, por Miami y Bogotá. Este año Miami supera a Ciudad de Panamá como la ciudad preferida de los directivos españoles para vivir.
Cada vez hay más “una amalgama de pequeñas y medianas empresas de todos los sectores” que eligen el país azteca como su primera parada a la hora de internacionalizarse en la región, según Martínez. En 2019 la presencia de PYMES fue del 72 % en México, seguido por un 59 % en Colombia y un 43 % en Chile.
Pero no todas las expectativas están perdidas para la región. José Antonio Llorente, socio fundador y presidente de Llorente & Cuenca, ha asegurado tener “mucha confianza en el futuro de América Latina”, durante la presentación del informe, pese a que ha reconocido que existe “una gran brecha entre la ciudadanía y las instituciones”. “Tenemos que encontrar soluciones entre todos” ha destacado.
Conectar a América Latina con Asia es una de los retos que ha planteado Juan Cierco, director corporativo de Iberia. Cierco ha manifestado su interés por hacer de Madrid “el hub de conexión entre la Latinoamérica y Asia, independientemente de la coyuntura del coronavirus”. También ha recordado que en septiembre de este año se celebrará el 74 aniversario del primer vuelo trasatlántico de la aerolínea, que aterrizó en Buenos Aires.