Enagás, la Secretaría de Estado de Energía, Puertos del Estado y la Comisión Europea han presentado el proyecto CORE LNGas, una iniciativa que pretende impulsar una cadena logística de gas natural licuado (GNL) que permita impulsar la utilización del gas como combustible para el transporte, especialmente marítimo. Este proyecto, además, contribuirá a la descarbonización de los corredores europeos del Mediterráneo y del Atlántico.
La Península Ibérica, que según Enagás (coordinador principal de un consorcio de 42 socios) tiene una “posición geoestratégica privilegiada”, cuenta ya con 8 plantas de regasificación “claves” para el desarrollo de soluciones logísticas de GNL. Estos factores, unidos, hacen de nuestro país “un referente europeo en este ámbito”.
“La iniciativa contempla la realización de 25 estudios, impulsados por los socios, para la adaptación de las infraestructuras y el desarrollo logístico-comercial”. Esto permitirá la prestación de servicios small scale (abastecimiento a pequeña escala) y bunkering (suministro de GNL como combustible para barcos). Al estar en línea con la estrategia de Unión Europea de combustibles alternativo (el llamado ‘Clean Power for Transport'), este proyecto, como se ha citado antes, contribuirá a la descarbonización de los corredores del Mediterráneo y del Atlántico, ya que el GNL es uno de los combustibles fósiles “más respetuosos con el medio ambiente, pues genera alrededor de un 30% menos de emisiones de CO2 que el petróleo y sus derivados”, explican desde Enagás.
La compañía energética informa que la inversión total del proyecto será de “33 millones de euros, de los cuales la mitad será financiada con fondos de la Comisión Europea”. De hecho, CORE LNGas ha sido seleccionada por la Comisión como adjudicataria en la convocatoria de ayudas del mecanismo ‘Conectar Europa’ (más conocida como CEF) para el desarrollo de la Red Transeuropea de Transporte. La ejecución del proyecto, que servirá de base para proponer el ‘Marco de Acción Nacional’ del GNL como combustible marítimo en España, está prevista hasta el año 2020.