El gestor de la navegación aérea española, Enaire, ha terminado la implantación de las diversas mejoras destinadas al Aeropuerto de Palma de Mallorca. Además, con motivo de la llegada de las vacaciones (en las que se prevé un gran aumento, respecto a otros años, de la demanda de tráfico), también se ha reestructurado parte del espacio aéreo de Baleares y se ha puesto en operación nuevos procedimientos operacionales de navegación.
Así, en coordinación con Aena, Enaire ha implantado un nuevo procedimiento que flexibilizará la operación de aeronaves en el Aeropuerto de Palma de Mallorca cuando se produzcan situaciones de visibilidad reducida, como niebla o nubes bajas. Esto permitirá duplicar la capacidad operativa del mismo en condiciones de meteorología adversa, “aprovechando en su totalidad los sistemas de vigilancia en superficie (radar de superficie y multilateración), así como las diversas modificaciones llevadas a cabo en la infraestructura aeroportuaria, como la iluminación de los puntos de espera intermedios”, afirman.
Asimismo, los controladores aéreos (que estarán conectados con los pilotos) utilizarán otra metodología, esta vez separando los aviones (en tierra) en bloques. Aprovechando los citados bloques, definidos por los tramos de calles de rodaje entre dos puntos de espera intermedios iluminados, independientes entre sí, van dando paso a las aeronaves de forma similar a un sistema de exclusas. Explican que, por ejemplo, cuando un avión se dispone a despegar y rueda por la plataforma, avanzando progresivamente, “deja tras de sí un bloque libre para que lo ocupe otra aeronave. Dicha situación se produce de forma similar en las llegadas, ya que van rodando progresivamente y liberando bloques para los siguientes tráficos de llegada”.
Entre estas mejoras, también se han incluido varias funcionalidades del sistema SACTA (Sistema Automatizado de Control de Tránsito Aéreo, creado por Enaire) de gestión de la navegación aérea: mejora en la operativa de niveles (a través de la nueva funcionalidad CF2, que proporciona importantes mejoras en los procesos de coordinación y transferencia de vuelos entre sectores y centros de control), gestor de llegadas (AMAN), secuenciador de despegues (DMAN) y Operativa sin Ficha de Papel (OSF, para la comunicación exclusiva entre controlador y piloto).
