Enaire, el gestor de la navegación aérea en nuestro país, ha realizado un ejercicio para optimizar vuelos mediante una colaboración que comparte, de forma efectiva, datos entre diferentes grupos de interés como compañías y aeropuertos. Este ejercicio ha hecho que participen conjuntamente los centros de control aéreo de Madrid, Barcelona y Palma de Mallorca más cuatro aeropuertos de Aena (Barcelona - El Prat, Adolfo Suárez Madrid -Barajas, Alicante - Elche y Palma de Mallorca).
Así, Enaire y los cuatro aeropuertos han intercambiado con Eurocontrol (la organización europea para la seguridad aérea) los datos planificados de llegadas y salidas hasta un horizonte de 24 horas con el objetivo de incrementar la predictibilidad de la red. De este modo, el ejercicio ha puesto de manifiesto “los beneficios que suponen para los pasajeros aumentar la predictibilidad y precisión del tráfico gracias al trabajo conjunto”. Estas horas han sido asignadas por los gestores de afluencia de Enaire, siguiendo la selección inicial de la herramienta que mantenía la planificación de las aerolíneas, perteneciente a expertos del FMP (Flow Management Position).
Además, este ejercicio consigue mejorar la conciencia situacional de los controladores aéreos y acelerar el proceso de toma de decisiones. Este hecho, llamado “resolver puntos calientes” (cuando la demanda de tráfico supera la capacidad), y aplicando reglas locales, logra reducir drásticamente el número de vuelos afectados por los retrasos aminorando así, de forma significativa, la propagación de los mismos.
Este ejercicio está enmarcado dentro del proyecto tecnológico SESAR, el responsable del llamado Cielo Único Europeo, un proyecto conjunto de transporte aéreo de la Comisión Europea, cuyo objetivo es la implantación para 2020 de un sistema de navegación aérea de altas prestaciones. “Es interoperable, óptimo y sostenible, y gestiona con mayor eficiencia el incremento de demanda de tráfico aéreo prevista para los próximos años”, explican desde la institución aérea.