El mundo del coworking también está atravesando un proceso de reinvención debido a la pandemia. «Hemos tenido que innovar para seguir siendo útiles a la sociedad», afirma a este periódico Javier Esteban, City Manager de Aticco Madrid. Esta startup de espacios de trabajo flexibles fue creada en 2016, en un contexto muy diferente al actual. «Actualmente no tenemos la capacidad que nos gustaría», reconoce Esteban, que ha hecho bueno ese dicho de «si no puedes con tu enemigo únete a él».
De este modo, Aticco Madrid ha reconvertido sus espacios de coworking en bibliotecas para universitarios en plena época de exámenes. Lo ha hecho junto a Ucademy, plataforma online de educación para estudiantes preuniversitarios que detectó hace unas semanas una problemática a través de los testimonios de sus alumnos: muchas asignaturas continúan en formato online, y las instalaciones de la universidad han dejado de ser el campo base de los estudiantes. Las limitaciones de uso de los centros universitarios, sumados a la reducción del aforo de cafeterías, han restringido al máximo las opciones que tienen los estudiantes de encontrar salas de estudio.
Por ello, Aticco Madrid y Ucademy han diseñado unos planes específicos para estudiantes que les permita tener un punto de encuentro. Y sobre todo, como destaca Esteban, «mezclar a los jóvenes en un espacio de esencia emprendedora en donde, además de estudiar, puedan producirse sinergias de cara al futuro».
Este nuevo concepto de biblioteca privada permitirá a los estudiantes acceder al espacio con libertad horaria –respetando, eso sí, las limitaciones horarias del toque de queda– incluso los días festivos. «Desde siempre, nuestros espacios de coworking han estado abiertos 24/7. Somos conscientes de que tenemos que adaptarnos a estos tiempos difíciles, por eso esta colaboración es una buena solución para todos», valora Esteban.
Las instalaciones de Aticco María de Molina –donde está ubicada la nueva biblioteca– disponen de espacios luminosos de trabajo, amplias salas de reuniones, cocina, espacio polivalente, cabinas para llamadas y una terraza. En palabras de Esteban, «los estudiantes podrán disfrutar del internet más rápido, impresoras, café y té ilimitados, sillas ergonómicas, climatización… En definitiva, todos los servicios necesarios para que puedan centrarse sin tener interrupciones».
En una primera fase, el servicio estará disponible hasta el 29 de enero, aunque Esteban ya ha manifestado su voluntad de prolongarlo. «Sería todo un éxito, porque podríamos seguir aportando valor a una comunidad tan importante como la de los estudiantes universitarios». Por el momento, los planes permiten que cada estudiante contrate el espacio según sus necesidades. Se ofrecen pases diarios, semanales o ilimitados. Tras este primer experimento, Esteban asegura que «próximamente habrá más novedades».