La estratosfera lleva demasiados años sin estar vigilada por el ser humano. O eso ha debido pensar la Agencia Espacial Europea (ESA) que le ha encargado al Grupo de Ingeniería Aeroespacial de la Universidad de León la misión de “conquistarlo”. En realidad, es una misión de investigación para el posible uso de satélites en esta zona e intentar así incorporarlos para misiones estratégicas futuras.
Para este proyecto utilizarán dirigibles y aviones ligeros propulsados por energía solar, unos vehículos que pueden controlarse autónomamente y quedarse en la estratosfera durante varios meses. Estos pseudo-satélites (no llegan a serlo, pero vuelan más alto que los aviones corrientes) podrán expandir las redes de comunicaciones actuales “hasta lugares remotos o de orografía complicada, incrementar notablemente los anchos de banda en zonas concretas, cubrir regiones sin infraestructura terrestre o restablecer en minutos redes de comunicaciones críticas que hayan sido dañadas”, explican desde Thales Alenia Space España, una de las empresas que colaborarán con la Universidad de León junto a Deimos (Portugal) y Airobotics (Alemania).
Con este control de la estratosfera, previsto para dentro de un año, el pseudo-satélite de la ESA se adelantará a gigantes tecnológicos como Facebook y Google, que ya han intentado lanzar varios para controlar mejor los lugares de paso de los satélites de comunicaciones y llegar a todos los países. Los servicios de inteligencia de varios países (de los que no se han dado nombre) también han intentado conquistar la estratosfera para utilizar satélites de telecomunicación de verdad.
¿Qué supondrá tener un pseudo-satélite de estas características a más de 20 kilómetros de altura? La toma de imágenes de alta resolución (cámaras más cercanas que las de los satélites, ideales para misiones de vigilancia); y la llamada “observación persistente”, que consiste en quedarse en un lugar fijo, mientras que los satélites tienen que estar orbitando continuamente a gran velocidad y los detalles pueden perderse.
Thales Alenia Space España ya ha trabajado en proyectos de este tipo. De hecho, ya está desarrollando el llamado Stratobus, un dirigible estratosférico autónomo (“a medio camino entre un dron y un satélite”, especifican), cuyo piloto está previsto para un lanzamiento en 2018. Su bajo coste, indican, lo hace ideal para soluciones de este tipo.