La innovación alimentaria se cocina a fuego lento, pero sin pausa. El foodtech ha venido para quedarse. Así lo reflejan los últimos datos en cuanto a inversión en el sector: un 41% más en startups en 2021 que en 2020, según datos de Eatable Adventures. Precisamente la empresa ha contado con su mayor representante, José Luis Cabañero, que ha ofrecido una charla sobre el futuro del sector agroalimentario durante el primer ‘Startups Day’ de Madrid Food Innovation Hub. «La tecnología consigue mercados más amplios. Esto está pasando ya en el mundo de la alimentación».
El foodtech no solo lo conforman empresas que aprovechan tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT), el big data o la Inteligencia Artificial (IA), entre otras, para transformar la industria agroalimentaria, sino que se ha convertido desde que comenzó la pandemia en una forma de entender el sector. La nueva ola de innovación ya se está produciendo, y con ella han surgido startups que aprovechan la digitalización y las tecnologías emergentes para generar productos únicos.
El ‘Startups Day’ de Madrid Food Innovation Hub, en el que Innovaspain ha estado presente testando muchos de los proyectos, ha sido una clara demostración de que la tecnología cada vez llega más rápido a la alimentación. La cita ha supuesto un ensayo general de hacía dónde va la industria alimentaria y qué productos podremos encontrarnos en los lineales de los supermercados y en los establecimientos de restauración en los próximos meses.
No obstante, el CEO de Eatable Adventures ha recordado que «existen ciertas presiones» que no terminan de hacer despegar la agroalimentación española, pese a ser un país puntero. En España, la industria de alimentación y bebidas es la primera rama manufacturera del sector industrial, según los últimos datos de Estadística Estructural de Empresas del INE, con 126.354,1 M€ de cifra de negocios y representa el 2,5% del PIB de España. «El covid, la guerra en Ucrania, el incremento de la población… Son todo factores que determinan la evolución del sector», ha apuntado Cabañero. Aunque remarca dos aspectos a resolver para la viabilidad del sector. «La crisis energética y el calentamiento global pueden marcar el futuro del foodtech».
¿Y si fallan los planes?
«Hay que prepararse por si la innovación tecnológica no funciona», ha avisado Cabañero. En este sentido, el experto considera que el sector podría avanzar de manera más sólida hacia la sostenibilidad. «El consumidor está transformándose y la sostenibilidad puede ser un negocio. De hecho, quienes dicen que sale demasiado cara no son conscientes de que lo que les saldrá caro a sus negocios es no apostar por ella».
También ha definido a la web 3.0 –término que se utiliza para describir una red informática en la que todos los datos están conectados y en la que todas las máquinas procesan el contenido de igual forma que los humanos– y la inteligencia artificial como «tecnologías impulsoras para lograr una agroalimentación más resiliente».