A las empresas españolas les cuesta cada vez más retener y fidelizar el talento. ¿Puede la inteligencia artificial ayudar a encontrar una solución? Para Beatriz Crespo, fundadora y CEO de Freedom & Flow, una startup que crea soluciones de bienestar corporativo, la respuesta es “un sí contundente”.
“En los últimos dos años, ha crecido el interés de las organizaciones por el bienestar de los empleados, sobre todo después de la pandemia. Tenemos ratios de absentismo por enfermedad en niveles históricos, y la gente abandona su puesto de trabajo de forma voluntaria. Ante estos dos hechos, las directivas empiezan a apostar por profesionalizar la inversión que hacen en bienestar”, asegura Crespo. “Pero necesitan indicadores que midan ese impacto. Es en dar respuesta a esta necesidad en la que trabajamos”, añade.
España es el país con la mayor rotación laboral de toda la Unión Europea. Cerca de 1,2 millones abandonaron su empleo en el primer trimestre de 2024, mientras que 1,28 iniciaron uno nuevo, según datos de Eurostat. Además, el absentismo laboral sigue creciendo en el país: en promedio, más de 1,4 millones de personas no acudieron diariamente a su puesto de trabajo cada día durante el primer trimestre de 2024, según un informe de Randstad.
Cómo la IA puede ayudar
Freedom & Flow, que este año celebra su décimo aniversario, desarrolla técnicas de IA para recopilar y analizar datos masivos de forma estructurada, lo que permite identificar patrones de comportamiento relacionados con el bienestar de los empleados e medir su impacto en el negocio.
“Lo primero que estamos haciendo es emplear algoritmos de machine learning para procesar grandes volúmenes de datos provenientes de diferentes diagnósticos que hemos creado”, detalla Beatriz Crespo. “La clave está en la capacidad que tenemos para estructurar y limpiar esos datos de forma eficiente, asegurando que no solo sean de alta calidad, sino que sean representativos de la realidad de la organización”, precisa. Hasta la fecha, las organizaciones tenían muchos datos que recogían de informes, evaluaciones y proveedores de salud o mutuas, todos inconexos entre sí.
Healthy Box
El resultado de este esfuerzo es una plataforma llamada ‘Healthy Box’ que, a partir de estos patrones, mide cuál es el estado de bienestar de los trabajadores y de la organización, analiza la propuesta de valor de la empresa y la compara con las mejores prácticas del mercado. “De esta manera, las gestoras de personas pueden saber qué necesitan los empleados, dónde están invirtiendo y cuáles son los riesgos que pueden afectar el negocio”, explica Crespo. Por último, la compañía propone un “pasaporte digital de hábitos saludables”.
Fruto de este análisis, las compañías apuestan cada vez más por planes estratégicos de bienestar a medio y largo plazo, más que en acciones aisladas. “Las empresas empiezan de forma proactiva a proponer soluciones que de verdad se alinean mucho más con las necesidades de los empleados que, por ejemplo, poner clases esporádicas de mindfulness, o llevarles a hacer actividades de team building puntuales a una montaña”, asegura Crespo. Acciones que pueden ayudar a mejorar la motivación del trabajador pero que a la larga “se ha demostrado, con datos y con ciencia, que no tienen un impacto positivo en el negocio”, señala.
La clave: mayor flexibilidad
Para la experta, una buena solución de conciliación sería que los trabajadores pudieran gozar de una mayor flexibilidad. “Más que reducir la jornada a cuatro días, lo que sí hemos demostrado que puede ser óptimo, tanto para la empresa como para el empleado, es la flexibilidad horaria y espacial para cumplir con los objetivos de la empresa”, destaca Crespo. De hecho, los seis empleados de Freedom & Flow teletrabajan.
Y es que, en su opinión, las políticas de conciliación deben ajustarse a las necesidades reales de los trabajadores y no solo atender a “familias normativas con hijos pequeños o casadas, sino a otros tipos de estructuras familiares”. Uno de los nuevos patrones que la experta ha detectado es que cada vez hay más jóvenes con personas adultas a su cargo. “La dependencia familiar de un adulto a cargo es muy cara y se necesita una conciliación. Cuando detectamos esos patrones acompañamos a nuestros clientes a proveer de soluciones que ahorren costes sanitarios”, detalla.
Del gimnasio a la oficina
La idea de Freedom & Flow nació en un gimnasio. Beatriz Crespo, con un doctorado en medicina y otro en rendimiento deportivo, trabajaba en el Hospital de Parapléjicos de Toledo y entrenaba a empresarios en un centro deportivo. Un día, una directiva le propuso entrenar al resto de directivos de su compañía. Y así fue como inició esta aventura. Empezó a investigar qué dispositivos podían medir el estrés y el impacto que tenían sus entrenamientos. Y poco a poco fue demostrando que si una empresa invertía en el bienestar de sus trabajadores a través del deporte, podía ayudarles a gestionar el estrés de una forma mucho más óptima.
Hoy, Freedom & Flow está creciendo dentro y fuera de España. Su idea ha sido nombrada por Forbes en este 2024 como una de las más brillantes del año. En el primer trimestre de este año, la compañía alcanzó un 15% de nuevos clientes, además de conseguir un 100% de fidelización.
“En menos de un mes hemos tenido más de 65 reuniones con nuevos posibles clientes. Antes teníamos 65 reuniones en todo el año”, comenta Crespo. Entre sus clientes se encuentran compañías como Leroy Merlin, Red Eléctrica Española, Mutua de Pelayo Seguros, Mahou San Miguel, McDonald’s España, la Unión de Créditos Inmobiliarios, Aliaxis o Sanitas.
La empresa tiene también clientes en Chile y está abriendo mercado en México y en Perú. La compañía recibió el año pa- sado la subvención europea Innova Adelante, gestionada por el Gobierno de Castilla La Mancha, y ha sido la primera en recibir la subvención de Enisa dentro de la categoría de emprendedoras digitales.
Retos a futuro
Para Beatriz Crespo, uno de los principales retos es alcanzar una IA sin sesgos. “Creo que todavía queda recorrido para poder crear bases de datos limpias y estructuradas que no estén sesgadas por otras prácticas”.
La empresa apuesta por seguir facilitándole la vida a las personas gracias a la IA, como por ejemplo, mediante chatbots conversacionales que puedan trasladar en tiempo real ese pasaporte digital de hábitos saludables. En consonancia con esta idea, la emprendedora publicó en mayo el libro MicroIAbitos saludables: el poder de los microhábitos, una obra en la que propone pequeñas acciones de menos de dos minutos que se pue- dan integrar fácilmente en la vida diaria. Un libro en el que papel e inteligencia artificial se dan la mano para ayudar a las personas a cuidarse “casi sin darse cuenta”, asegura.