La Fundación Altran para la Innovación y el Club Excelencia en Gestión han puesto en marcha Be TalentSTEAM, una plataforma de colaboración abierta que pretende impulsar la transformación del modelo educativo y aproximarlo a una nueva realidad en la que la innovación y la tecnología marcarán la aparición de nuevos trabajos y el final de una época para otros.
Be TalentSTEAM integra todos los grupos de interés: colegios públicos, privados y concertados; universidades públicas y privadas, centros de formación profesional; asociaciones e instituciones, mundo empresarial, administración central, autonómica y local, el tercer sector y al entorno familiar para, como decía ayer durante su presentación en Madrid José Ramón Magarzo, presidente de Altran España y Fundación Altran “lograr que la educación sea el eje vertebrador de una sociedad más comprometida, solidaria y equitativa; más innovadora y competitiva”.
Un proyecto sobre el que Alberto Durán, presidente del Club Excelencia en Gestión e ILUNION declaraba que “unos aprenderemos de otros” y que tiene como vocación desarrollar estrategias conjuntas, generar conocimiento y talento o impulsar vocaciones STEAM. “Ha llegado el momento de atender el gap entre capacitación y demanda del mercado laboral. O hacemos las cosa de forma distinta, o muchos puestos no serán cubiertos”, añadía Durán.
Los integrantes de la plataforma (por el momento 24 partners) también tiene marcado en rojo la eliminación de brechas sociales, con la brecha de género como un hándicap de especial incidencia. Pese a que en España estamos por encima de la media de la OCDE en matriculados en carreras STEAM –un 30% de los alumnos- sólo uno de cada cuatro es mujer. El dato, expresado por Nieves Segovia, presidenta de la Institución Educativa SEK (en la que además de los colegios SEK está integrada la Universidad Camilo José Cela) deja patente que “estamos construyendo una segunda brecha de género, que además tendrá difícil solución”. Según Segovia, “toda la cadena de generación de talento tenemos que reflexionar sobre dónde y por qué perdemos ese talento femenino”. Un problema definido como “derroche social” por Alejandro Arranz, director general de Investigación e Innovación de la Comunidad de Madrid, para quien se trata de un déficit que afecta a todo occidente, complejo de resolver a corto plazo, con connotaciones sociales y distintos orígenes; en la educación, la familia… “No podemos perder el talento femenino por culpa de estereotipos”, ha apuntado Arranz, que ha llamado a la acción y a poner en marcha medidas de impacto en un escenario donde “el sistema educativo no puede vivir al margen”.
Para curarse en salud, en el Eurocolegio CASVI tratan de orientar a los alumnos en una fase más temprana y así evitar que desechen determinadas carreras sin tener un conocimiento más amplio sobre las mismas. Como explicaba su director, Juan Luis Yagüe, “aunque hay más alumnos en el bachillerato de ciencias, a la hora de elegir carrera prima la seguridad, que la universidad esté cerca de casa o una menor dificultad para sacarlas adelante”.
En la empresa privada ya hay problemas para localizar y canalizar estos talentos, con mayor ímpetu en empresas de alto componente técnico, como Metro de Madrid. Su CEO, Borja Carabante, admitía ayer que necesitan perfiles polivalentes, flexibles y creativos “dispuestos a recibir formación continua” y que, aunque están lejos los tiempos en los era extraño ver una mujer como maquinista (la primera no ejerce en Metro de Madrid hasta 1983) aún están lejos del ideal, ya que la proporción es muy similar a la de las integrantes de las carreras STEAM y sólo el 25% de mujeres de la plantilla ocupa un puesto técnico.
Entre las propuestas para cambiar el rumbo expuestas por estos representantes de la Red BeTalentSTEAM, destaca el reciente Plan STEMadrid puesto en marcha por la Comunidad de Madrid, que dotará de más recursos a los centros educativos que fomenten las vocaciones científicas de sus alumnos. “La solución no está en la puerta de las facultades, ahí la suerte ya está echada. Los sistemas educativos han estado más centrados en los contenidos que en las habilidades, y hay que combinar ambas vertientes”, explicaba Alejandro Arranz sobre un cambio necesario aunque, como reconocía Juan Luis Yagüe, “a los colegios nos cuesta mucho adaptarnos a la sociedad”. El director del Eurocolegio CASVI se alineaba con Arranz al defender que el profesor tiene que dejar de ser el centro del aula y del aprendizaje, y sí una fuente formativa más cuyos conocimientos tienen que ser complementados por alumnos inquietos con ganas de aprender.
Si la comunicación entre Escuela-Universidad-Empresa, en cualquier dirección y combinación ha sido hasta ahora escasa o nula, para Nieves Segovia ha llegado el momento de colaborar más que nunca. “Si el sistema educativo actual es fruto de la Primera Revolución Industrial, y funcionó, hoy podemos asegurar que la formación preuniversitaria y la empresa nunca estuvieron tan lejos. Hay que educar para la incertidumbre; conversar y trabajar con un fin único”. Según la responsable de la Institución Educativa SEK, universidad y empresa tienen que empezar a diseñar juntos determinados grados y “que lo corporativo se asome al ámbito escolar con retos reales, pegados al contexto en el que los alumnos se mueven”. Una cooperación para la que corren buenos tiempos en opinión de Alejandro Arranz ahora que “hay predisposición hasta en las partes más ‘duras’ del sistema”. El responsable público sí llamaba a la paciencia y a la persistencia, más en una región como Madrid, donde una “generosa amplitud de miras” con responsabilidad nacional e internacional, hace complicado que la identidad fluya en aras de un bien común en el que se integre el ecosistema al completo. “Hay que insistir y tener continuidad”, concluía Arranz
PRIMERA INICIATIVA
S.I.M. es un Concurso de Ideas Socialmente Innovadoras, dirigido a alumnas y alumnos de 1º y 2º de la ESO, de colegios públicos y privados, que trabajarán “hermanados”, para dar respuesta a los retos sociales vinculados a los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 y planteados por Cruz Roja e ILUNION. Este concurso pondrá de relieve la importancia de los trabajos en equipo, multidisciplinares, en entornos muy diferentes, fuera de la zona de confort, y con el reto social común de cómo hacer una sociedad mejor y más justa.
Los estudiantes de los colegios públicos y privados trabajarán juntos en el mismo equipo, para responder de forma innovadora a los retos sociales. Con la colaboración de la red de partners, los profesores gestionarán hasta 12 workshops dinámicos, interactivos y operativas con las que gestionar nuevos modelos de colaboración entre estudiantes de colegios distintos, con retos sociales comunes y con la innovación y las nuevas tecnologías como herramientas claves. Así, se realizarán píldoras y dinámicas de trabajo alrededor del Design Thinking, la utilización de internet y las matemáticas en nuestro día a día, robótica, y youtuber. Estos talleres se desarrollarán con la colaboración de la UPM, Altran, la Universidad Camilo José Cela y Cruz Roja Juventud.
A finales de este año se conocerán los ganadores del Concurso S.I.M. durante una jornada de innovación y tecnología, en la que los diez equipos finalistas tendrán la posibilidad de defender sus ideas ante un jurado compuesto por las directivas y directivos de la red de Stakeholders.
LA RED
Junto al Club Excelencia en Gestión y Fundación Altran para la Innovación, se encuentran:
9 colegios públicos y privados: Eurocolegio CASVI, IES “Velázquez de Móstoles”, la Institución Educativa S.E.K., el IES “El Burgo de Las Rozas”; el Colegio San Patricio, el IES “Ángel Corella” en Colmenar Viejo; el Colegio “Ramón y Cajal”, el IES “San Juan Bautista; y el Colegio Base.
2 universidades: la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y la Universidad “Camilo José Cela”.
4 entidades sociales: Cruz Roja Española a través de Cruz Roja Juventud, ILUNION, Fundación Tecnologías Sociales “TECSOS” y Fundación Vodafone España;
5 empresas: OTIS, Metro de Madrid, XEROX, CASER y ALTRAN.
2 instituciones públicas: la Comunidad de Madrid a través de su Consejería de Educación e Innovación y el Ayuntamiento de Alcobendas.
