En un futuro llegará un modelo educativo que sea total. De momento no lo conocemos; si lo tuviéramos, ya sería real. Pero a Madrid, concretamente a la Fundación Telefónica, ha llegado un método de programación desde París que promete tener un 100% de inserción laboral –de hecho, esos son los resultados en los más de diez países donde se ha implantado– a través de la gamificación y el peer to peer (pares entre pares). Su nombre, 42Madrid.
“La empleabilidad del siglo XXI requiere un nuevo modelo de aprendizaje debido a la imparable revolución digital. Desde Telefónica y la Fundación apostamos por la educación a través de la tecnología como una de las mejores formas de fomentar el progreso, la cohesión social y no dejar a nadie atrás. Lo que nos ha empujado a traer a España 42Madrid es que creemos que en una educación que abarque todas las fases de aprendizaje a lo largo de la vida, sin importar la edad”, ha declarado el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, durante la presentación.
Pallete se ha referido también a varias de las principales características del método educativo; y es que el proceso no es un bootcamp: es un espacio donde, a través de la gamificación, cada alumno puede marcar libremente su ritmo de aprendizaje, un aprendizaje donde prima “el trabajo colaborativo, el esfuerzo y la constancia”. No hay libros, no hay profesores, no hay clases tutorizadas. Pero no se puede avanzar en los niveles si no se trabaja de manera colaborativa ya que son los propios alumnos los que se evalúan unos a otros.
Aseguran que su inserción laboral posterior es del 100%. Es más: los alumnos, durante esta escuela tan particular, reciben “una media de ocho ofertas de empleo”. Así, los alumnos que hayan completado el primer círculo estarán preparados para realizar prácticas en empresas –todas las escuelas 42 tienen contactos con empresas que demandan perfiles tecnológicos–. Pero, ¿a qué se refieren con estos “círculos”?
La metodología de aprendizaje de 42Madrid se basa en niveles –21– agrupados en dos círculos, y hay que superarlos como si fuera un videojuego. El primer círculo por abarca materias comunes (algoritmos, sistemas, gráficos). El segundo ya va complicado la materia de estudio y entran contenidos más específicos: inteligencia artificial, ciberseguridad, videojuegos, diseño gráfico…
Situado en las Tablas –dos plantas con varias secciones para los alumnos y abierta 24/7–, se prevé que el curso tenga una media de duración de tres años. Así que las plazas no son ilimitadas: tendrá unas 900 plazas, y desde esta misma semana cualquiera se puede apuntar. Como recordaba Pallete, la edad no es ningún problema: está abierta a todo el mundo, aunque la media de edad más habitual en otros países está entre los 18 y los 35 años. Además, tampoco son necesarias ni formación ni titulaciones previas.
“Está pensada para todos aquellos a los que les apasione la tecnología o simplemente les llame la atención o sean conscientes de que el mundo está cambiando y la digitalización es imprescindible para casi cualquier puesto de trabajo. También, para todos aquellos que no tienen claro qué quieren estudiar, o para quienes quieran reciclarse, empezar de nuevo o estén buscando empleo”. En definitiva, está abierta a todo el mundo.
Pero, para entrar, hay que pasar, primero, una prueba online: la primera es un ejercicio de memoria de 10 minutos de duración y un test de lógica de dos horas y media. Los que la superen pasarán a la siguiente fase, la decisiva: habrá que realizar 13 proyectos de programación duros y exigentes –estarán una media de 12-14 horas diarias en la escuela durante un mes–, donde la idea es comprobar “la actitud, las ganas de aprender y de colaborar con el resto de participantes”.