Vodafone ha organizado una mesa redonda llamada ‘Masters del Metaverso’, celebrado en el espacio 5G Lab de su sede central del Madrid, en colaboración con Plug & Play, donde han hablado varios expertos relacionados con la formación de este nuevo concepto. Además, los participantes también han indicado varias claves sobre el futuro del metaverso: ¿ya está aquí? ¿En qué consiste? ¿Tiene relación con otras tecnologías?
La primera de los participantes ha sido Lorena Gómez, cofundadora de Inmersiva XR, la asociación de realidad extensiva de España. Lo que hacen desde allí es conectar a todas las personas, empresas y profesionales que se dedican a la realidad extendida y les dan visibilidad, tanto a ellos como a sus proyectos, además de formación.
Así, Gómez ha explicado que el metaverso es una visión y todavía no existe. “Lo que pasa es que todavía no hemos llegado ahí y es una confluencia de muchas tecnologías que se están desarrollando pero no han terminado de unirse en ese Internet de tres dimensiones”.
Según ella, cuando dejemos de llamarle metaverso y le volvamos a llamar Internet, como pasó con el ciberespacio, el público en general ya habrá llegado al verdadero metaverso.
“Ahora mismo -ha adelantado-, estamos en ese paso intermedio y cada persona que va haciendo algo relacionado con ello le pone la ‘etiqueta’ porque es una manera de atraer público, es interesante y da el titular. Pero no todo lo que se está haciendo será parte de ese metaverso final”.
Un metaverso lejos de Ready Player One
Por su parte, José Olivares, director académico de Madrid Content School, una institución que quiere convertirse en la intersección entre el mundo académico y el mundo profesional, con diversos programas de formación dirigidos a profesionales, ha destacado que, con el hype del metaverso, en la calle la gente se imagina Ready Player One o Matrix. “Y estamos bastante lejos”.
Para Olivares, lo que se necesita es que converjan muchas tecnologías. La perspectiva que tiene es que seguramente se reproduzcan las mismas fases que en las dos revoluciones digitales anteriores.
“La realidad es que tenemos dos grandes barreras tecnológicas: 5G y los dispositivos. Y una tercera que no era tan dramática en las dos revoluciones anteriores, que es cómo cambia nuestra relación con el entorno. Necesitamos provocar, asimilar y asumir un cambio de chip”.
Interoperabilidad
El programa Metaverso de ISDI, cuenta un perfil dirigido a perfiles ejecutivos, donde intentan capacitar digitalmente a personas que normalmente están trabajando en entornos digitales. La media de edad del primer programa fue 48 años. Y Mauro Fuentes, director de este programa, destaca que la clave de cara a los próximos años es la interoperabilidad entre los diferentes entornos.
Y es que, cuando fue la revolución de la Web1, se hablaba de la red de redes, muchas redes diferentes que gracias a la World Wide Web se pudieron conectar entre ellas y tenías redes académicas, militares, etcétera.
Con el metaverso, según él, pasará lo mismo: “Tendremos en casa experiencias inmersivas que podrás disfrutar en el domicilio, pero cuando salgas a la calle tendrás otras. Los usuarios tienen que encontrar un valor real a la utilización de todo esto, porque al final son fuegos de artificio. Está muy bien que compres un dispositivo, pero yo quiero utilizar ese dispositivo en todos los entornos”.
Visión antropológica
José Luis Navarro es profesor en The Valley Business, lleva formación en temas de XR, todo lo que son tecnologías inmersivas. Con la llegada del metaverso, intenta “ofrecer luz” sobre ese contexto a un tipo de perfil de negocio que intente resolver problemas, crear entornos propios, etcétera.
Pero, para Navarro, el enfoque que hay que empezar a ponerle al metaverso es más antropológico y menos tecnológico. “Hay una parte sobre el efecto social que se va a producir, no solo en el ser humano, sino en las actividades y en la parte profesional”.
Ha indicado que es un camino muy extraño: antes la tecnología entraba por la parte de las empresas y salía al mundo. Luego fue desde el móvil al usuario y más tarde entraron las empresas… Situaciones donde la tecnología adquiere excesiva relevancia estando en el centro y confunde incluso en la semántica de la definición del mismo proceso como la propia palabra blockchain o metaverso.
“Palabras en el día a día de la gente que no saben qué son. Todo ese camino tenemos que traducirlo hacia la utilidad, la única manera de que se comprenda y que vean como funciona. Hablamos de convergencia digital, no de transformación. Hay que empezar a desmitificarlo y ver su utilidad”, ha subrayado.
El branding
Por último, ha participado Alejandro Moga, CEO de Metaverse University, que en septiembre sacará su primera oferta formativa “siendo conscientes que el metaverso es un elemento que la gente idealiza en el sentido de su conceptualización estricta”.
Él ha destacado el branding engañoso. “Yo me escapo del branding utilizando el metaverso. Que utilicen el metaverso para eso me parece bien, pero el metaverso, entendiéndolo etimológicamente y antropológicamente solo hay uno, nada de criptos ni NFT”.
Para Moga es una conceptualización que puede ser “una palabra nueva” pero lleva a que solo puede haber uno. Lo que se está construyendo, ha afirmado, son espacios virtuales que utilizan las tecnologías inmersivas para poder experimentar la persona o la empresa, desde el ámbito de consumo minorista o mayorista.
Puede haber mundos virtuales, como está haciendo Meta, y por tanto será otro elemento que formará parte de los cambios que vienen. “Pero si no hay interconectividad -ha especificado- esto no servirá para nada porque los consumos de la gente serán de una analogía casi exacta. Si no, la gente no se lo va a creer y pensará que son productos de branding y no un elemento de evolución de lo que entendemos hoy por Internet”.