Científicos de la UNAM encabezados por Salvador Curiel Ramírez, investigador del Instituto de Astronomía, lograron la detección de un exoplaneta (planeta fuera del sistema solar) utilizando ondas de radio.
TVLM513b es un gigante gaseoso de tipo Saturno, ubicado a unos 20 años luz de la Tierra, que gira en torno a una estrella enana ultrafría en un periodo de 221 días y cuya masa es cerca del 38 % la de Júpiter.
“Hasta ahora no se había podido encontrar un solo planeta usando esta técnica. Es el primer exoplaneta en el mundo que se utiliza con esta técnica”, ha advertido Curiel.
“Es un proyecto que iniciamos hace años para buscar exoplanetas. Como soy radioastrónomo, pensé en usar observaciones de radio y busqué fuentes donde hubiera posibilidades de encontrar planetas. Hallé varias y me centré en esta, con señales de que podría haber algo girando alrededor de la estrella”, ha asegurado Curiel. El hallazgo fue motivo de un artículo, publicado en la revista The Astronomical Journal.
Por el momento los expertos no han logrado medirlo, pero la teoría de formación de planetas indica que aquellos que tienen esta masa tan baja no son rocosos. Puede tener un núcleo de hierro u otros materiales, como Saturno y Júpiter, pero la parte externa es gaseosa.
Los científicos utilizaron el Very Long Baseline Array (VLBA), un sistema de diez radiotelescopios con diámetros de 25 metros, operados de forma remota en Socorro, Nuevo México.
La detección se logró utilizando la técnica de astrometría absoluta, que mide la posición de las estrellas con muy alta precisión.
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La técnica, que es complementaria a las otras que existen, inaugura una nueva forma de encontrar exoplanetas.
“Con astrometría se puede seguir el movimiento de las estrellas en el cielo y se usa para medir la distancia hacia ellas. Es un método muy preciso, pero si la estrella tiene planetas que giran a su alrededor, hacen que se mueva de manera oscilatoria alrededor del centro de masa”, ha precisado.
“Estos movimientos son muy pequeños, dependen de la masa del planeta y de su distancia a la estrella; les llamamos ‘bamboleo de la estrella’, y se requieren observaciones muy precisas y de alta calidad para medirlos”, ha añadido.
Sospecha de un segundo planeta
Curiel Ramírez y sus colaboradores sospechan de la existencia de un segundo planeta. “Lo mencionamos en el artículo, pero nuestras observaciones no son suficientes. Ya aprobaron más observaciones con el radiotelescopio y en los próximos dos años lo confirmaremos”.
“Es el primero, no hay duda de que está ahí, aunque se tiene que confirmar, por ejemplo, con la sonda espacial Gaia (de la Agencia Espacial Europea)”, ha asegurado.
El investigador ha aclarado que los planetas no emiten mucha radiación, su emisión es muy leve y son difíciles de ver directamente. “La mayoría de las técnicas son indirectas, lo que se estudia es la estrella y de ahí se infiere la presencia del planeta, que realmente no vemos, sino el efecto que tiene sobre la estrella”.
Con otros procedimientos, como la velocidad radial, se mide la aceleración de la estrella debido al jalón gravitacional del planeta, y en caso de la técnica de tránsito, el paso del planeta frente a ese cuerpo celeste bloquea parte de la emisión de ésta y por eso disminuye su luz, ha detallado.
Los radioastrónomos también estudian otras fuentes donde sospechan que hay más planetas. “En el transcurso de los próximos dos o tres años esperamos publicar el descubrimiento de varios exoplanetas”, ha sentenciado.
Para el astrónomo mexicano, esta técnica amplía lo que se sabe sobre el universo ya que permitirá no solo descubrir más de estos planetas, sino saber cómo nacen estos o cómo se desarrollan.
“Hace 25 años se pensaba que el sistema solar era el modelo y luego se encontró que los sistemas planetarios no son similares [...]. Estamos aprendiendo mucho sobre cómo se forman los sistemas planetarios. Hay muchas cosas que se pueden ir descubriendo”, ha agregado.
