Iberdrola, junto a la entidad financiera Kutxabank, ha desarrollado con éxito un proyecto de tecnología blockchain –a través de la plataforma Energy Web Foundation–, con el que han conseguido acreditar que la energía suministrada y consumida por el cliente es 100% renovable. Esto contribuirá, según la compañía, “a acelerar el proceso de descarbonización de la empresa”. Todo ello gracias a que el banco español ha podido trazar la procedencia de la energía suministrada por Iberdrola.
“La innovación –aseguran desde la compañía energética– nos demuestra que el blockchain es una herramienta aceleradora clave del proceso de descarbonización de la economía, aportando trazabilidad, seguridad y rapidez a las transacciones. En este caso, el suministro de energía verde es más eficiente, flexible y transparente y, con ello, se incentiva la producción y el consumo de energía 100% renovable”.
Y es que la tecnología blockchain permite asignar, de forma ágil, “los activos que suministraran energía al punto de consumo e, incluso, establecer una jerarquía de prioridades en las fuentes de origen”. Asimismo, elimina intermediarios, ya que los contratos inteligentes bajo los que se trabaja se “autoejecutan” cuando las dos partes cumplen lo firmado, simplificando así el proceso, eliminando costes y favoreciendo la privacidad. De hecho, esto es lo que ha permitido acelerar los procesos de certificación de energía renovables, obteniendo un mayor grado de trazabilidad de la certificación y más transparencia y seguridad en la transacción –que queda registrada de forma inamovible–.
Esto último es lo que buscan entidades financieras como Kutxabank. Para ellos, este proyecto supone “una nueva oportunidad para continuar profundizando en los criterios de sostenibilidad que guían nuestra actividad, puesto que llevamos años desarrollando diversas actuaciones tanto de forma directa e indirecta, con el objetivo de minimizar la huella ambiental. Las nuevas tecnologías se descubren como una aliada para mejorar el conocimiento acerca del origen de la energía que se consume en la entidad bancaria, que aspira a que en el futuro cercano sea completamente renovable”.
Cabe decir que la energía renovable ha sido generada por los parques eólicos de Oiz (Vizcaya) y Maranchón (Guadalajara, Castilla-La Mancha) y la central hidroeléctrica de San Esteban (Orense, Galicia). Por otro lado, el consumo de energía limpia ha sido realizado en las sedes de Kutxabank y Cajasur, en el País Vasco y Córdoba.