El Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) ha puesto en marca la red de agroecología para el desarrollo de prácticas agronómicas amigables con el medio ambiente. El objetivo es fomentar y coordinar, a lo largo del país, las actividades de investigación y extensión caracterizadas por la sostenibilidad.
La agroecología es una disciplina científica orientada a conjugar la agronomía con la ecología, dos campos que durante años han estado separadas. Se trata de “considerar los sistemas de cultivo o ganaderos como ecosistemas particulares donde el medio natural ha sido transformado por las prácticas agronómicas”, afirma Carlos Ovalle, de INIA La Cruz. De esta forma se quiere encontrar “un mejor equilibrio entre las regulaciones naturales y las intervenciones humanas para concebir sistemas alimentarios más sostenibles”.
La inauguración de esta red se a realizado en el marco de la reunión anual del Programa Nacional de Agricultura Sustentable y Medio Ambiente del INIA, integrada por una veintena de especialistas. En dicho acto, Ovalle ha insistido en la necesidad de contar con una “política agrícola que fomente y oriente el desarrollo de este tipo de prácticas y un cambio de paradigma que tome en cuenta los valores de la sostenibilidad, ya que el agricultor no solo es responsable de producir alimentos, sino que tiene que hacerlo de una manera sostenible”.
Cecilia Céspedes, investigadora de INIA Quilamapu, ha generado estudios bajo el modelo de la agroecología. En su opinión, INIA tiene un potencial enorme para desarrollar investigación y extensión en esta área. En la actualidad existen prácticas agrícolas concretas, pero “se requiere validarlas bajo nuestras condiciones a través de la investigación”, ha advertido Carlos Ovalle.
“Se ha avanzado, pero tenemos un largo camino que recorrer en este aspecto y el INIA cuenta con especialistas en sanidad vegetal, manejo integrado de plagas, control biológico, nuevas formas de fertilización en base a materia orgánica, compostaje, etc.”, añade. También ha hecho un llamamiento a todos los investigadores y extensionistas para que se unan a la nueva red. El fin último es hacer realidad en el país una agricultura más productiva, pero a la vez más amigable con el medio ambiente.