Una “oportunidad única”, de las que pasan “una vez en la vida”. Consciente de esa importancia, Jaime Aznar está dispuesto a aprovechar al máximo estar entre los 30 estudiantes de todo el mundo que participan en el programa ‘Le Bridge Emprendimiento’, en la Universidad de California (Berkeley).
Conocer Silicon Valley y estudiar “en una de las mejores universidades del mundo” era un sueño, una meta casi inalcanzable por su elevado coste que ahora se ha hecho realizad. Y es que este joven emprendedor español también ha conseguido una de las diez becas del Banco Santander que cubren el cien por cien de la matrícula, con un coste de 20.000 euros
“El vivir en un lugar donde se respira el emprendimiento, el compartir clases y eventos con alumnos de todas partes del mundo, el poder asistir a meetups, eventos y clases impartidas por los mejores emprendedores y profesores en la actualidad será sin duda algo muy enriquecedor que me va a permitir conocer nuevas culturas, conocer gente emprendedora de distintas partes del mundo y, sobre todo, crear una red de contactos para toda la vida que en el futuro estoy seguro me será muy útil”, afirma.
CAMBIOS EN EL PROCESO DE COMPRAS
Serán diez meses en los que Aznar desarrollará su proyecto Invoys, cuya tecnología disruptiva basada en RFID, blockchain, machine learning y big data, tiene como objetivo mejorar la experiencia de compra del usuario en tiendas de ropa y supermercados eliminando las colas y TPV, además de acelerar y mejorar los procesos en la cadena de suministro, la logística y la trazabilidad.
“Siempre he sido una persona inquieta y desde los 15 o 16 años he querido crear algo que mejorara y facilitara el día a día de las personas”, reconoce. De ahí nace su inquietud emprendedora, basada, en este caso, en un rechazo personal. “No me gusta nada ir de compras –reconoce–, entre otras cosas, porque el proceso que hay que seguir en una tienda física para llevarte un artículo es una pérdida de tiempo”.
Por eso empezó a buscar la forma de saltarse todo ese proceso y hacer de la compra “algo mucho más rápido y sencillo”, un proceso que se puede realizar “sin tener que pasar por caja ni depender de nadie”, pero “sin dejar de lado la experiencia del usuario”. Y así nació Invoys.
Si mira al futuro, Aznar está convencido de que ir de compras “va a pasar de ser un mero trámite a ser una experiencia”. Lo importante no será tanto adquirir un producto sino lo que se experimenta en este proceso. “Y la tecnología va a tener mucho que ver en este sentido”.
Este alumno del Máster de Emprendimiento de la Universidad de Cantabria (UC) y el CISE pone algunos ejemplos. “Se podrá comprar en segundos, ‘probarte’ cinco camisas distintas en menos de un minuto, no tener que cargar con ello porque te lo envían a casa en menos de 24 horas… La tecnología va a cambiar totalmente la forma en la que compramos e interactuamos con los productos hasta tal punto de que creo que la compra presencial en tiendas seguirá siendo el método preferido para los clientes”.
AVANZAR MÁS RÁPIDO EN EE.UU.
En esa línea avanza Invoys, un proyecto que ahora podrá enriquecerse con la estancia de su impulsor en Estados Unidos. Jaime Aznar tiene claro que se puede aprender mucho de este país en relación al emprendimiento. Aquí, por ejemplo, “el fracaso no es una derrota, es un elemento de aprendizaje para mejorar”. “La gente que ha fracasado lo pone en sus curriculum con orgullo porque demuestra que lo han intentado”, añade. Y advierte de que no ocurre lo mismo en España, aunque poco a poco estamos cambiando a mejor. “La gente se está dando cuenta que fracasar es aprender”.
Además, continúa, en Norteamérica “el capital fluye sin prejuicios”. “Esto puede ser un arma de doble filo, ya que no deja de ser una apuesta a todo o nada, pero en EE. UU. si no pides 300.000 euros no te toman en serio; por contra, en España pides 5,000 euros y tienes trabas por todos lados y esto, quieras o no, tira para atrás –se lamenta–. Puedes tener la mejor idea del mundo y el mejor equipo detrás que sin un colchón inicial es difícil mantenerte en la lucha y crecer. Incluso empresas como Facebook necesitaron de una inversión inicial para empezar”.
Su idea, “si todo sale bien”, es quedarse en San Francisco, una vez transcurridos los 10 meses de programa, para “terminar de desarrollar la tecnología ahí y, más adelante, traerla a Europa”. “Creo que en California puedo encontrar las herramientas y contactos necesarios que me permitan avanzar mucho más rápido”, asegura.
BLOG Y CROWDFUNDING
Durante su estancia en EE.UU. irá contando su experiencia en un blog que estará operativo a partir del domingo 12 de agosto. Además, ha puesto en marcha una campaña de crowdfunding para poder completar el programa el California y desarrollar la tecnología Invoys.
“El coste de vida aquí es muy elevado y el visado que me han concedido no me deja trabajar”, afirma, antes de aclarar que “toda donación va de forma directa o indirecta al desarrollo de la tecnología” para su proyecto emprendedor.
“No es la típica campaña de Kickstarter donde puedes recibir algo (un producto) a cambio porque todavía no está desarrollado, pero todo aquel que done puede contar con mi ayuda en cualquier tema que tenga que ver con Blockchain, AI, Machinelearning, RFID… –continúa–. Se podría decir que a cambio ofrezco mis servicios, contactos y conocimientos en estas materias para cualquier duda que puedan tener o ayuda que necesiten para sus propios proyectos”.