Su actividad en el campo de la innovación tiene muchas vertientes. Es el autor, por ejemplo, de la newsletter Futurizable, dedicada al futuro de la tecnología y su impacto en los negocios. Pero, además, Javier Martín Robles fundó Loogic, un medio de información de referencia especializado en emprendedores y startups, y también puso en marcha Iniciador, los eventos de emprendedores para emprendedores realizados desde 2007. Ha publicado diversos libros, como Emprender Ligero o Smart Money. Es director de Innovación Abierta en Sngular, donde trabajan con startups y corporaciones para ayudarles a innovar.
1. A lo largo de su trayectoria profesional, ¿qué decisión ha tomado que haya tenido como consecuencia un mayor grado de innovación?
Creo que las mejores decisiones que he tomado han estado relacionadas con comenzar a dar a conocer los proyectos que tenía desde sus fases más iniciales. Por ejemplo, cuando comencé con proyectos como Loogic y como Futurizable, desde el primer día estaba publicando contenidos sobre todo lo que iba aprendiendo, lo cual no solo me ayudada a nivel de aprendizaje sino para tener una audiencia a la que dar a conocer mis nuevos proyectos. Por otro lado, me ha dado muy buen resultado involucrar a los propios usuarios o clientes en los proyectos que iba montando, sobre todo a través del crowdfunding que para mi resulta una herramienta ideal para lanzar al mercado nuevos proyectos innovadores.
2. ¿Cuáles son las claves para culminar con éxito un proceso innovador?
Tanto para culminar como para comenzar, me parece fundamental contar con el talento que esté motivado para realizar los proyectos innovadores. De hecho, me parece muy recomendable que los proyectos de innovación sean desarrollados desde sus inicios por equipos multidisciplinares que cuenten con distintas responsabilidades dentro de la empresa, con el objetivo de que se enriquezcan al máximo de los conocimientos y motivaciones de distintas personas. Además de esto también es muy importante utilizar metodologías de innovación que permitan medir cómo se está desarrollando el proyecto en cuestión y también aprovechar al máximo la tecnología para darle la mayor proyección a la iniciativa que queremos desarrollar.
3. Tres consejos para quienes estén dispuestos a abordar cambios, acciones o procesos innovadores en su empresa o entorno.
Que no tenga miedo a probar cosas nuevas, a equivocarse y a empezar de nuevo si algo sale mal. La vida es un proceso de aprendizaje y se puede avanzar mucho más si no nos limitamos a nosotros mismos por el miedo a cometer errores o a fracasar.
Que haga lo posible por medir y verificar el resultado de todo lo que se vaya haciendo para comprobar si realmente se está avanzando en la situación adecuada y lo que se está haciendo tiene sentido en el mercado.
Que sea abierto y colaborativo para involucrar a muchas personas en este tipo de iniciativas que puedan enriquecerlo con sus puntos de vista y experiencias particulares.
4. ¿Cuál es, a su juicio, la mayor innovación que ha tenido lugar en los últimos 50 años en todos los ámbitos?
Internet, sin duda. Desde que comencé a usarlo en el año 95 para mi ha sido una forma de abrirme al mundo y me ha ofrecido multitud de oportunidades para emprender. Hasta tal punto que para mi ya no tiene sentido plantear ningún tipo de iniciativa a nivel empresarial que no tenga Internet como base, por la posibilidad de llegar a muchísima gente, de una forma muy rápida y directa, además de que la propia herramienta facilita enormemente las posibilidades de colaboración para todo tipo de personas.
Precisamente esta ventana al mundo que nos ofrece Internet a los profesionales que nos dedicamos a la innovación, debemos aprovecharla en su máximo potencial, porque considerando el ejemplo de la ventana, no puedes pretender abrir una ventana pero que la gente no vea lo que estás haciendo en el interior de la casa. Por eso es tan necesario tener una actitud de apertura, de colaboración y de transparencia, que será la base para construir los negocios del futuro.
