Salvador Mas, consejero delegado de la fintech Finametrix, e Iker Marcaide, polifacético líder de proyectos como Imagine Montessori o la empresa tecnológica PeerTransfeer (startup del año a nivel mundial en 2010), han sido premiados por la Asociación de Antiguos Alumnos de la UPV con sus galardones Innova&Acción y Blue Red, respectivamente, distintivo creado por esta organización, la más antigua de España en sus características y uno de los centros más activos en el ecosistema innovador. Además, de forma excepcional, se hizo entrega del Premio Extraordinario AntiguosUPV a Justo Nieto, rector de la UPV durante dos décadas y uno de los principales apoyos de la Asociación en sus orígenes.
Salvador Mas es un pionero en el mundo de las finanzas. Tras su paso por CaixaBank, Banco Urquijo y Bankinter fundó Invertia, portal financiero tomó posiciones antes que los demás en acercar la información económica al gran público. Más tarde creó OpenFinance, empresa de software para la gestión de carteras, y estuvo al frente de ella durante 12 años antes de venderla. Actualmente es CEO en la fintech Finametrix, también dedicada a la gestión de carteras, y que a pesar de su corta trayectoria -nació en 2015- cuenta ya con una plantilla de más de 20 ingenieros y una spin off, Simple Advisor. El Premio Innova&Acción reconoce la labor innovadora de aquellos profesionales que están cambiando la realidad de su sector y de la sociedad.
El Premio Blue Red 2016 recayó en Iker Marcaide por su capacidad para generar redes de valor y por su apuesta por la cooperación puesto que, cómo él mismo señala, “solo podemos construir gracias a lo que los demás han construido y están construyendo”.
En 2008, Marcaide creó en LinkedIn un grupo virtual con el objetivo de conectar a alumnos y antiguos alumnos que pudiesen ayudarse y generar grandes cosas. Cuando llegó el momento de pasar a una gestión del grupo más activa y profesional pensó en la Asociación. Gracias a él hoy existe un dinámico grupo que cuenta con más de 6.000 personas y del que ya están surgiendo proyectos de interés.
Por su parte, Justo Nieto es un ejemplo muy claro “de que todo es posible, de persona distinta que hizo las cosas de forma diferente, de persona que cree”, como afirmaba Olga Broto, directora de la Asociación de Antiguos Alumnos de la UPV en la gala de entrega de estos premios. Siendo rector de la UPV confió en el entonces incipiente proyecto de la Asociación de Antiguos Alumnos de la UPV y fue un gran impulso para los jóvenes estudiantes que estaban tratando de darle vida.
Con un currículum de calado, Nieto logró transformar la UPV con su forma de entender y de hacer las cosas. Quiso acercar la universidad a la sociedad y la abrió a las empresas y también a los niños, creando una Escola d’Estiu en el campus. Más de 3.000 empresas establecieron algún tipo de convenio con la UPV durante su mandato, aumentando la financiación privada de la universidad exponencialmente.