Oren Teicher, CEO de la Asociación Americana de Libreros (ABA, por sus siglas en inglés) desde 2009, ha querido contagiar a lectores hispanohablantes su optimismo sobre el futuro del libro. Tras 30 años en esta comunidad que reúne a más de 500 libreros independientes de Estados Unidos, Teicher tiene clara una idea: el libro físico no va a desaparecer.
“Tenemos buenas noticias que compartir”, así ha comenzado Teicher su relato sobre el resurgir del libro impreso en su país este jueves en la Feria del Libro de Madrid, con la esperanza de que algo similar suceda en España. En EE. UU., comparado con hace 10 años, ha habido un ligero crecimiento en el número de librerías independientes, pese a que tener una librería “no es un negocio para hacerse rico”, ha reconocido Teicher. Además, entre 2017 y 2018 hubo un incremento en las ventas del 5 %.
Pese a los pronósticos que auguraban la muerte del libro de papel frente al libro electrónico, desde 2014 la venta del ebook está disminuyendo, superada incluso por los libros de tapa dura, de acuerdo con Teicher. “La lectura digital obviamente tiene su lugar pero la experiencia de tocar un libro físico es la que es”, ha afirmado.
Aunque Teicher no ha podido negar que Amazon representa una competencia “feroz” para el sector. “Hay cosas muy positivas pero tampoco podemos engañarnos, la envergadura de Amazon es colosal”, ha sentenciado. En un contexto como este, la ABA, una asociación sin fines lucrativos que surgió en 1990, tiene como objetivo ayudar a sus libreros para que tengan herramientas con las que competir. “Hay un sentido de comunidad entre los libreros”, ha asegurado.
Su crítica a Amazon fue rotunda. De acuerdo con datos de Civic Economics de 2019 citados por Teicher, la empresa ha provocado el cierre de 62.000 tiendas, la pérdida de 900.000 puestos de trabajo, así como entre 5.500 y 7.000 millones de impuestos no pagados.
La diversidad de las librerías es uno de los principales factores que, de acuerdo con el CEO de la asociación que está por retirarse, explica su supervivencia. “Todas las tiendas son distintas y eso gusta a los consumidores. Les gusta llegar a un lugar que no es la copia de la otra”, ha añadido.
Las redes sociales han revolucionado la forma en que comunican las librerías. “Es indispensable que se adapten al uso de las redes sociales”, ha afirmado. La publicación de un boletín mensual con las recomendaciones que hacen los propios libreros llamado IndieNext, en el que incluyen también a autores menos conocidos, ha sido otra de sus estrategias, ya que, según él, “a los lectores les encantan las listas”.
Los libreros independientes de EE UU apuestan también por darle valor a la experiencia del lector. “Si tenemos éxito es porque hacemos bien lo que mejor sabemos hacer: ofrecer una experiencia única al cliente”, ha asegurado y ha catacterizado a los libreros como “los emprendedores más emprendedores de todos los emprendedores”.
El mercado de los libros en el país norteamericano no es como el de España, allá los libros no tienen precio fijo, en un 95 % de los casos es el editor quien sugiere un precio de venta, es ilegal fijar un precio.