La innovación total puede conseguirse. O eso han afirmado en Venture Building, un evento celebrado en la Fundación Telefónica donde se han explicado los elementos fundamentales del emprendimiento (visión, talento, know-how, red y capital), relacionándolos con un modelo innovador que pueda ser, como han reiterado durante toda la jornada, “total”.
“La innovación total es un proceso de industrialización del emprendimiento, en el que todo se trabaja a la vez, no en proyectos separados”, explica brevemente Carlos Barrabés, presidente del Grupo Barrabés, una de las tres empresas que, junto a Telefónica Open Future_ y la APD, se han reunido para tratar el tema. Él asegura que casi todas las empresas se están conectando, formando redes que se conectan entre sí. “La gran regla es que, sino eres red, no puedes establecer conexiones. Todo esto nos lleva a un mundo que ya no es local, es personal; la localidad geográfica es algo del pasado”.
Y es que, aunque para Barrabés sea algo del pasado, en nuestro país está más presente que nunca. De hecho, según los Índices de Innovación del año 2016, España se encuentra en el vigésimo octavo puesto de países innovadores, muy lejos de una posible posición más acorde a nuestros términos de renta per cápita (duodécimo). Estos datos, presentados correctamente por Enrique Sánchez León, director general de la APD, muestran que, de momento, la innovación total quizá no puede instalarse en España.
“Lo que estamos viendo no es una crisis, sino una revolución, y mucho más fuerte que la industrial, a la que en sus inicios también se le llamó crisis. Esta que estamos viviendo va a tener más consecuencias que aquella y, si España se la vuelve a perder otra vez, las consecuencias van a ser mucho peores que las de entonces”, declara Valentín Fernández, director de desarrollo de negocio y partnerships de Telefónica Open Future_.
Más allá de un cierto pesimismo sobre la situación de la innovación en nuestro país, lo que está claro es que la conexión, tarde o temprano, tiene que pasar por la integración de las tecnologías emergentes que ya están revolucionando, aunque lento, los sectores de la economía. Esta nueva revolución pasará por España y deberemos estar preparados para cuando llegue, de verdad, la innovación total.