Más de 200 personas trabajan en el Instituto de Hortofruticultura Subtropical y Mediterránea (IHSM) La Mayora para desarrollar, a través de la ciencia y la innovación, nuevas formas de cultivo sostenible. Estos proyectos han sido considerados como «fundamentales» por la ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, «ante retos globales como el cambio climático y el crecimiento mundial de la población». La inauguración de la nueva sede de La Mayora, centro mixto entre el CSIC y la Universidad de Málaga (UMA), alojará a los diferentes grupos de investigación de ambas partes para avanzar hacia un sistema agroalimentario más sostenible.
La nueva sede dispone de 15 cámaras de cultivo que, junto con los invernaderos de vidrio altamente tecnificados, constituyen una infraestructura considerable para el cultivo de plantas, que complementa a la disponible en la Estación Experimental del IHSM en Algarrobo. Además, el edificio cuenta con avanzados servicio de microscopía óptica, metabolómica y cultivo in vitro, alberga de un Laboratorio de Confinamiento para estudios de investigación en condiciones de aislamiento biológico y cuenta con el equipamiento científico más novedoso en cada uno de sus laboratorios.
«Desde los comienzos este Instituto ha demostrado que se puede hacer un sector hortofrutícola fuerte y poner en valor a los agricultores», ha señalado Enrique Moriones, director del IHSM La Mayora. El nuevo edificio supone «una oportunidad inmejorable» para generar innovación, ha recalcado Moriones, además de «convertir a Málaga y al conjunto de España en referentes en cultivos subtropicales y mediterráneos».
Durante el acto, la ministra ha trasladado el compromiso del Gobierno para reforzar el sistema agroalimentario español, creando nuevas oportunidades para el crecimiento económico, el empleo y la competitividad del sector y del conjunto de la economía. En este sentido, Morant ha recordado que el PERTE Agroalimentario, aprobado el pasado 8 de febrero en Consejo de Ministros, promoverá el desarrollo integrado de toda la cadena agroalimentaria con el objetivo de facilitar a la población el acceso a alimentos sanos, seguros y sostenibles.
Este PERTE contará con una inversión pública de unos 1.000 millones de euros hasta 2023 y se prevé que genere un impacto de partida en la economía de unos 3.000 millones de euros, así como la creación de hasta 16.000 empleos. En concreto, el Ministerio de Ciencia e Innovación movilizará más de 130 millones de euros con el fin de promover las herramientas de I+D+I necesarias para avanzar hacia un sector agroalimentario más sostenible e inteligente. «Durante los próximos dos años, caminaremos hacia esta meta con el impulso de los fondos europeos y a través de los modelos de cogestión científica más vanguardistas de Europa», ha destacado Morant.
Málaga, «polo de innovación»
En el último trimestre del año Málaga contará también con una renovada sede del Instituto Español de Oceanografía (IEO), que estará situada en el muelle de San Andrés. «Hemos invertido más de siete millones de euros en este nuevo edifico en el que trabajarán 90 científicos y técnicos», ha resaltado Morant. El objetivo del Gobierno es convertir a la ciudad en «un verdadero polo de innovación del sur de Europa», en palabras de la ministra.
El nuevo edificio permitirá continuar y mejorar la labor fundamental que realiza el IEO en la investigación del mar y sus recursos en una localización de enorme interés para la ciencia como es el Mar de Alborán. El centro se dedicará al estudio de la biodiversidad marina, la evaluación pesquera, el control de la contaminación, el cambio climático o el estudio de riesgos geológicos marinos.