Un grupo de investigadores de la Universidad de Barcelona (UB) ha descubierto que las propiedades que contiene la piel de las aceitunas podría reducir de forma notoria los tumores intestinales. El estudio tiene como objetivo final el desarrollo de un suplemento alimenticio para las personas afectadas por esta variante de la enfermedad.
La principal investigadora, Marta Cascante, ha asegurado que ese sumplemento, de carácter natural por estar elaborado con los desechos de las aceitunas que quedan tras la producción de aceite, no sólo ayudará a reducir los tumores intestinales. Además, generará "un valor, aprovechando los residuos de la industria alimentaria".
Las personas que sufren pólipos intestinales en el colon y el recto tienen que someterse durante toda su vida a controles exhaustivos y a extracciones de pólipos para evitar que se transformen en tumores. En algunos casos, ha añadido Cascante, “el problema no se solventa hasta terminar con una colectomía". Por eso ha destacado la necesidad de investigar y avanzar en posibles tratamientos "para esta enfermedad minoritaria".
Hasta ahora las investigaciones se han realizado con ratones. Durante seis semanas se les ha suministrado el compuesto de pieles de aceituna para comprobar si la reducción de los pólipos intestinales era efectiva. Como resultado se ha podido demostrar una reducción del 45%. En opinión de esta investigadora, “si el producto que consigues proviene de productos actualmente considerados como residuos, el valor es doble: ambiental y social".
Ahora mismo el proyecto está preparado para pasar a la siguiente fase, de ensayo clínico, de la mano de empresas españolas del sector biotecnológico como Biomaslinic. Cascante también ha adelantado que sigue trabajando en esta misma línea pero con la piel de las uvas.