Usar la realidad virtual como herramienta terapéutica en pacientes con ictus crónico puede reforzar los beneficios de la terapia convencional en los pacientes con ictus crónico. Así se desprende de una investigación desarrollada en la Universidad Pública de Navarra (UPNA) por la fisioterapeuta y terapeuta ocupacional Sandra Iturralde. En este estudio se ha visto cómo gracias a la herramienta ‘VirtualRehab’, diseñada por la empresa Virtualware Group y profesionales especialistas en neurorrehabilitación, se han podido crear sesiones de rehabilitación adaptadas a las secuelas de cada paciente, obteniendo resultados objetivos.
El trabajo, en forma de tesis doctoral, se ha centrado en la implementación de una nueva estrategia de rehabilitación en la fase crónica de evolución del ictus. Para ello, la investigadora ha analizado los resultados obtenidos a raíz de aplicar 30 sesiones de realidad virtual con un grupo de pacientes, para quienes se diseñó ejercicios personalizados, que tenían en cuenta el hemisferio cerebral donde el paciente había sufrido el ictus y en los que el grado de dificultad se iba incrementando progresivamente.
El software empleado por la herramienta VirtualRehab permite crear un entorno interactivo en el que unos sensores detectan al paciente, de tal forma que puede realizar los ejercicios diseñados en un entorno seguro. Y los resultados del estudio, han señalado desde la UPNA, “fueron muy positivos y ofrecieron una mejoría en cuatro de las siete áreas evaluadas: equilibrio, marcha, actividades de la vida diaria y la movilidad de las extremidades superiores e inferiores”.
INVESTIGAR SU EFICACIA
El objetivo inicial del estudio era comprobar qué efecto tiene la realidad virtual aplicada a la recuperación de los pacientes con ictus isquémico, analizando al mismo tiempo cómo actuaba este refuerzo terapéutico en función de la localización de la lesión en aspectos como el equilibrio, la coordinación o la movilidad de las extremidades entre otras. Todo ello, ha explicado la investigadora Sandra Iturralde, bajo la filosofía de que “cada vez son más las herramientas o técnicas que se usan para la rehabilitación de este tipo de pacientes, de ahí la necesidad de investigar su verdadera eficacia y así favorecer su recuperación”.