La necesidad de no tirar colillas en las playas

El proyecto Libera vuelve con su iniciativa ‘1m2 por las playas y los mares’, que promueve la recogida de la denominada “basuraleza”
basuraleza playas Libera

Se calcula que de los 6,5 billones de cigarros que se fuman cada año alrededor del mundo, unos 4,5 terminan tirados en el suelo de nuestro planeta. De hecho, según el proyecto Libera de SEO/Birdlife, la colilla “es uno de los residuos más encontrados en estos ecosistemas, seguido, entre otros elementos, de las toallitas húmedas” . Este tipo de restos, que en esta iniciativa suelen denominar como “basuraleza”, invade los espacios naturales marinos de manera continua, haciendo que su presencia en las playas contamine el paisaje natural. 

Es por eso que este verano ha vuelto el proyecto ‘1m2 por las playas y los mares’, una iniciativa que consiste en recoger la llamada basuraleza en diferentes entornos marinos para después analizarla y recoger datos que permitan conocer el volumen, la cantidad y la tipología de estos. Así, hasta el 22 de septiembre, “cualquier organización, asociación, entidad o colectivo podrá participar creando puntos de recogida de basuraleza”. Por otro lado, “las recogidas de residuos abandonados se llevarán a cabo del 28 de septiembre al 6 de octubre”.

Miguel Muñoz, de SEO/BirdLife y coordinador del proyecto Libera, afirma que necesitan conocer con precisión “cuál es el estado de nuestros mares y playas para poder llevar a cabo campañas de conservación o sensibilización efectivas sobre la basuraleza. Es emocionante ver como cada año miles de héroes salen a las playas de forma altruista, no solo a recoger basura, sino a ayudarnos a engordar la base de datos científica con la que poder trabajar desde el conocimiento”.

[Lea también: 20.000 niños lucharán por defender la conservación del planeta]

Para poder trabajar mejor recogiendo la basuraleza en las playas, el proyecto Libera ha recomendado “la aplicación móvil Marnoba, desarrollada por la Asociación Vertidos Cero y KAI Marine Services, una plataforma que recopila, almacena y muestra información sobre las basuras marinas de las costas y los mares de España”. De este modo, los datos obtenidos en esta campaña a través de estas dos herramientas se integrarán en la base de datos del Ministerio para la Transición Ecológica.

Algunos de los datos que ya se conocen de esta basuraleza –hay que tener en cuenta que este es el tercer año seguido del proyecto– son, por ejemplo, las graves consecuencias de los componentes de los cigarrillos: “cadmio, arsénico, alquitrán, tolueno; sustancias que, al entrar en contacto con el agua, tiene efectos devastadores en la naturaleza, provocando un grave impacto en la calidad de las playas y del agua afectando a la flora y fauna que dependen de este medio”. De hecho, cada colilla puede llegar a contaminar “hasta 10 litros de agua salada y hasta 50 litros si es agua dulce”.  

“Conocer las consecuencias que los residuos abandonados producen en nuestras playas nos sirve, ante todo, para poner el foco en la prevención y la concienciación. La crisis climática presente solo significa que debemos pasar a la acción. Si sumamos esfuerzos, cada pequeño gesto se convierte en un gran paso en nuestra lucha contra la basuraleza, donde el mayor beneficiado será el planeta en el que vivimos”, ha declarado, por otro lado, Sara Güemes, de Ecoembes –institución colaboradora del proyecto Libera– y también coordinadora del mismo.

Especiales