Una escuela de programación y nuevas tecnologías para niños de 6 a 16 años. Esto es lo que ofrece Lifecole, una plataforma online y en directo que enseña el lenguaje del siglo XXI. A través de cuatro niveles, durante un recorrido de unos seis años, los menores pueden aprender de la mano de expertos materias como: programación y videojuegos, producción audiovisual, robótica, arte digital o redes sociales y streaming.
Los contenidos de las clases no son estáticos. “Son contenidos que se van alimentando de las novedades porque las nuevas tecnologías van cambiando”, afirma Belén Cabido (Madrid, 1989), una de las fundadoras de esta plataforma, finalista de los Women Startup Awards 2023. La empresa recibe inversiones de Atresmedia, Grupo Planeta, Ilerna, Antai Ventures y Bonsai Venture Capital. La startup también fue finalista del South Summit Madrid 2022 en el área de educación.
"Los niños tienen más información que los profesores"
Esta transformación constante de los contenidos obliga a su vez a los 65 profesores de la plataforma, ubicados en distintas partes del mundo, a formarse de manera permanente. “El reto que tiene hoy el sistema educativo es que los niños tienen más información que los propios profesores”, añade, “es el primer momento histórico en que el niño tiene a su merced todo tipo de información”.
Las clases de Lifecole duran 75 minutos, son en español y cuentan con un máximo de seis alumnos por grupo, en función de la edad y el nivel. Por estas “aulas” han pasado unos 6.000 alumnos y hay matriculados más de 2.000. Aunque el objetivo de la empresa en 2024 es centrarse en el mercado español, Cabido no descarta ampliar su oferta a Latinoamérica en 2025.
Un mercado que no es nuevo para la empresaria. Ella fundó en México GoTrendier, una plataforma de compra y venta de prendas de segunda mano, de la que todavía es socia y que sigue creciendo en el país norteamericano y en Colombia.
Fruto de la pandemia
Lifecole es hija de la pandemia. Al ver cómo esta estaba afectando el sector educativo Jesús Monleón, uno de los socios inversores de la empresa, propuso a Cabido crear Lifecole. La idea inicial es que fuera una plataforma de cursos extraescolares como guitarra, ajedrez o gastronomía pero se dieron cuenta que los padres estaban más interesados por cursos de programación y diseño de videojuegos. “Había una preocupación por parte de los padres por la educación y el lenguaje del siglo XXI”, señala. Así que decidieron darle un giro al proyecto.
Uso responsable de las pantallas
La emprendedora es consciente de la creciente inquietud que tienen muchos padres de que sus hijos pasen mucho tiempo frente las pantallas, pero considera que es posible hacer un uso responsable de estas. “Lifecole pretende ser esa conciencia responsable del uso de las pantallas. Si mi hijo va a estar jugando, prefiero que esté programando y aprendiendo codificación con algo que le motiva”, destaca. Por ello, la empresa ha decidido apostar por el uso responsable de las pantallas a través de la formación en las nuevas tecnologías.
“Los niños pasan mucho tiempo frente a una pantalla y eso no va a cambiar, incluso va a ir a peor. Y lamento decir esto pero nosotros mismos [los adultos] nos pasamos todo el día frente a una pantalla”, afirma, “nos quejamos de los niños pero somos los primeros en actuar de la misma forma”.
Cabido opina que uno de los grandes obstáculos al que se enfrenta las mujeres que quieren emprender es la falta de información, por lo que cree que es necesario que haya más formación en emprendimiento. “Hay gente con muy buenas ideas pero que no tiene formación para llevarlas a cabo”, señala,
El otro gran obstáculo está en ellas mismas. “Somos mucho más capaces de lo que nosotras nos imaginamos. A veces el peor enemigo de una mujer es su cabeza”, asegura.