La crisis provocada por el COVID-19, según el equipo de LoConseguiremos, ha traído efectos negativos en la salud mental en todos los sectores de la sociedad, como el empresarial. Algunas prácticas extendidas, como el teletrabajo, han cobrado un gran protagonismo: estudios como el realizado por la OIT (Organización Internacional del Trabajo) en 2020, señala que el 60% de los empleados sufren depresión o ansiedad. Por otra parte, la mitad de los días laborables no productivos son consecuencia de los efectos nocivos del estrés en la salud de los trabajadores.
Por ello, han publicado un análisis para advertir que la salud mental es la gran olvidada en el mundo empresarial tras la pandemia: los departamentos de recursos humanos de las empresas deben evaluar periódicamente con objetividad la salud psicosocial de sus plantillas. Y, ahora, la Inspección de Trabajo podrá sancionar a las empresas que no controlen riesgos psicosociales como la ansiedad o el estrés.
“Hay una necesidad, cada vez más visible, de que las personas necesitan hablar sobre sus preocupaciones, sobre lo que les gustaría mejorar de su entorno… En la empresa pasa lo mismo. Los trabajadores se ven en situaciones complicadas y en muchos casos no tienen la confianza de decirlo y pedir ayuda”, explica Brais Urceira, psicólogo de LoConseguiremos.
Su trabajo se centra en ofrecer a las personas –en este caso los trabajadores de la empresa– “una ayuda sincera y un apoyo para que puedan hablar de lo que les preocupa o entristece. Además, queremos acercar las posturas entre jefes y empleados, que hablen y se muestren que son un equipo”.
¿Cómo controlar la salud mental en el trabajo?
Según Urceira, hay que gestionar bien la salud de los trabajadores –no solo la física, si no la mental–, buscar el mayor bienestar en el puesto de trabajo y para ello elaborar un conjunto exhaustivo de procedimientos.
“Siempre –incide– se debe controlar la salud mental en el puesto de trabajo”. Y es que una mala salud mental no solo afecta a la salud de los empleados, sino que también repercute en el rendimiento y beneficios de la empresa: pérdida de productividad y costes del absentismo y presentismo. “No menos importantes son otros efectos menos tangibles, como un estado de ánimo negativo entre los trabajadores que puede conllevar una reputación desfavorable para la compañía”, apunta.
Como dato a considerar, en LoConseguiremos resaltan que las ventas de una empresa con empleados satisfechos y felices aumentan por encima del 30%.
Así, entre las mejores técnicas para adaptar el día a día se encuentra gestionar bien el tiempo de trabajo, la organización y tomar determinados descansos o pausas para desconectar; “mantener el lugar de trabajo siempre limpio y ordenado; es positivo hacer algo nuevo cada día porque es terapéutico, genera buenas sensaciones y te saca de la rutina; y, por último, apoyarse en terapia online, donde no es necesario desplazarse y se puede adaptar al horario del trabajador con, además, la máxima confidencialidad".
La innovación en psicología
Para Brais Urceira, todo evoluciona constantemente y la salud mental no tiene por qué ser menos. "Creemos que debe ser una prioridad, y más después de estos meses de pandemia en los que muchas personas se han visto obligadas a trabajar desde casa, con los riesgos que conlleva para la salud emocional”.
Tras la crisis, los trabajadores y los no trabajadores han muchas horas de alguna manera confinados y eso puede llevar a síntomas de ansiedad, posibles depresiones o fobias a espacios abiertos. Todo esto, explica, nos puede llevar a la necesidad de una reintegración laboral para evitar el deterioro de nuestra salud mental.
“Aun así, la pandemia también nos ha hecho aprender nuevas fórmulas y técnicas para adaptarlas a todas las personas y a sus circunstancias. Nos hemos aprovechado de las tecnologías que nos han permitido mantenernos conectados en los ámbitos personales y profesionales para cuidar la salud mental. La terapia online es una de las innovaciones a destacar. Antes tenías que desplazarte hasta el lugar de consulta con un horario más rígido pero a través de estas sesiones hay una gran flexibilidad y agilidad en las agendas de todos”, muestra.
Según él, las nuevas tecnologías son las grandes aliadas en la innovación y han ayudado a no perder el contacto y continuar las terapias online con tranquilidad y de forma segura.
Los próximos meses
La sociedad se está adaptando a las nuevas circunstancias, a lo que denominan “nueva normalidad”. Y el ser humano evoluciona y debe adaptarse a los nuevos procesos.
Desde el Colegio Oficial de Psicología de Madrid aseguran que las empresas no pueden esperar que la productividad vuelva a los niveles anteriores a la pandemia porque la preocupación e incertidumbre de los trabajadores no se va solo con el tiempo. “Hay que trabajar en ello día a día. Así, los próximos meses seguirán siendo de adaptación e implementación de nuevas técnicas”, asegura.
De hecho, desde LoConseguiremos consideran que se debe buscar la simbiosis entre la empresa, Recursos Humanos y el resto de la plantilla, para lograr una atención psicológica que cuide el bienestar emocional de todo el ecosistema empresarial.