El número de personas que utilizan sus dispositivos móviles para acceder a internet en América Latina crecerá un 50 por ciento para fines de esta década, según revela un nuevo estudio de la GSMA. Se calcula que para 2020, la región sumará 150 millones de nuevos suscriptores, alcanzando así un total de 450 millones. Este aumento impulsará el crecimiento económico, la innovación y la inclusión digital, apunta el informe ‘La Economía Móvil: América Latina 2016’.
“El acelerado crecimiento del número de suscriptores de internet móvil experimentado en América Latina en los últimos años ha contribuido al desarrollo de una ‘economía de aplicaciones’ para las industrias de contenido y comercio móvil, a la vez que ha estimulado un entorno local próspero para las start-ups”, afirma Mats Granryd, director General de la GSMA. “En gran parte, esto se debe a que los operadores móviles locales han impulsado con éxito la migración de los suscriptores hacia los smartphones y las redes de banda ancha móvil, a pesar de tener que enfrentar, al mismo tiempo, cada vez mayores presiones competitivas y regulatorias en varios mercados de la región”.
De esta forma, América Latina se convertirá en la segunda región de más rápido crecimiento global durante dicho período, después de África subsahariana. Sin embargo, los niveles de penetración varían ampliamente en la región, con países como Cuba que hoy cuenta con una muy baja penetración (28 por ciento), y otros como Argentina, Chile y Uruguay, cuya penetración es superior al 90 por ciento.
La industria móvil
La adopción de smartphones continúa siendo estimulada por la caída de los precios de los smartphones y la cada vez más extensa disponibilidad de terminales de gama media y baja, destacan desde GSMA. Además, las continuas inversiones en redes 4G por parte de los operadores generaron que hoy la cobertura 4G alcance al 60 por ciento de los latinoamericanos y se espera que llegue al 80 por ciento para el próximo año.
“El nuevo reporte de la GSMA destaca el valioso aporte socioeconómico de la industria móvil a los mercados de América Latina, el cual estimula el círculo virtuoso que reduce la pobreza, mejora la infraestructura y los servicios, e incrementa aún más el acceso y uso de internet”, añade Granryd. “Para continuar con este crecimiento, la industria móvil y los gobiernos deben trabajar en forma conjunta para derribar las barreras que representan un obstáculo para la inclusión digital en las áreas de cobertura, asequibilidad, aptitudes digitales y disponibilidad de contenido local relevante.”
En su opinión, “el próximo desafío estará en la modernización de los marcos regulatorios existentes para facilitar el crecimiento de los servicios móviles futuros, promover la inversión de la industria y maximizar las oportunidades futuras que generará el ecosistema digital en beneficio de las economías latinoamericanas. El desarrollo de estos nuevos ecosistemas está impulsado por las pequeñas y medianas empresas locales, las cuales requieren de una mayor conectividad para desarrollar el contenido, las aplicaciones y las soluciones de valor agregado que están transformando las vidas de los usuarios y las empresas en toda la región”.