Oftalmólogo con una década de experiencia a sus espaldas, Elío Diez-Feijóo es un mix de médico, investigador y emprendedor. La elaboración de su tesis doctoral (publicada en 2017) le llevó a Estados Unidos y a Colombia. En España, ha ejercido en Burgos y Bilbao hasta establecerse (de momento), en Barcelona. Su interés por la tecnología va más allá del hobby. “He pasado varios años estudiando programación, involucrado en proyectos de desarrollo de software para medicina”, explica a Innovaspain el cofundador de Lumotech, la empresa detrás de Luke Assistant, una herramienta de inteligencia artificial que puede cambiar el día a día de los oftalmólogos y sus equipos.
“Llevaba un par de años inmerso en el estudio de la IA cuando llegó el boom de Chat GPT. Varias clínicas y compañeros de profesión me pidieron consejo. La IA generativa pilló a la mayoría de profesionales desprevenidos, pero detecté que existía una oportunidad”, apunta Diez-Feijóo.
Decidió moverse rápido, y para ello unió sus fortalezas con las de su socio, Pau Llambí, experto en marketing digital y en la difícil tarea de construir con garantías una startup. Si Chat GPT irrumpió en diciembre de 2022, en enero y febrero de 2023 mantuvieron las primeras reuniones con clínicas y en marzo firmaron el pacto de socios que convertía Lumotech en una realidad.
Primero, oftalmólogos y pacientes
La empresa tiene entre manos un primer desarrollo “dentro de un proyecto mucho más ambicioso”. Entre las funcionalidades ya disponibles de Luke Assistant, encontramos un puente personalizado que se conecta a la base de datos de cada clínica que quiera empezar a utilizar la herramienta de IA. “Luke Assintant se alimenta de los datos del pasado de todos los pacientes atendidos en la clínica. En base a esto, consulta la historia clínica del paciente, por qué ha acudido antes a consulta, sus antecedentes, alergias… De este modo, elabora un resumen automático para el oftalmólogo; le pone en antecedentes y evita determinados errores”.
Elío Diez-Feijóo define a Luke Assistan como “un colega” con el que el profesional médico puede conversar de manera natural acerca de cada paciente: qué razones le llevan a la clínica, qué tratamientos han funcionado y cuáles no… “En la conversación es posible preguntarle por alternativas posibles”, añade.
Por otro lado, durante la exploración Luke Assitant puede ayudar con el diagnóstico. “Con los datos históricos, lo que exprese el paciente y lo que el oftalmólogo vea en la exploración, genera un juicio que incluye posibles diagnósticos. No aporta el diagnóstico definitivo, eso le corresponde al oftalmólogo, que en todo momento supervisa la información. Pero Luke sí orienta, ofrece la opción de profundizar en sus conclusiones, qué camino seguir o qué pruebas adicionales conviene solicitar”.
Lo siguiente
La idea es convertir al asistente en un súper especialista en las diferentes ramas de la oftalmología que no deje de aprender. Alimentado con la literatura científica disponible, Luke Assistant será el aliado perfecto al que hacer las preguntas más difíciles. “Lo relevante es que se actualizará a diario con nuevos artículos, publicaciones o conclusiones de congresos. Será cada día más inteligente”.
En Lumotech también ultiman la incorporación del análisis de imágenes e informes, donde a la parte técnica se añade otra complicación con la que pretenden ser “estrictamente rigurosos”: el cumplimento de las distintas normativas de protección de datos, además de los imperativos éticos vinculados a la IA.
Por encima de todos estos avances, la vocación es que llegue un día en el que Luke Assistant pueda ser útil en todas las áreas de una clínica, desde la parte puramente médica, hasta el tedio y la poca eficiencia burocrática. “La gestión de los datos y la automatización de los procesos repetitivos están en el centro de nuestra actividad en este y otros proyectos de Lumotech. Las clínicas se han llenado de tecnologías, pero el núcleo es el mismo: un paciente que expone un problema y un médico que trata de resolverlo. Nuestro objetivo es beneficiar a todas las partes”.
Recuperar el tú a tú
Y es que Diez-Feijóo opina que la llegada de los ordenadores a las consultas ha mermado parte de la proximidad necesaria entre médicos y pacientes. “Nos pasamos horas detrás de una pantalla, sin mirar a los pacientes a la cara. La IA va a entrar en la salud, como en todos los sectores y, contra los pronósticos de algunos, va a recuperar parte del tú a tú perdido. Lo ideal es que los médicos seamos parte activa en la construcción de este nuevo ecosistema tecnológico basado en soluciones de IA. Será lo mejor para que no ocurra como con la llegada de los CRM, donde a veces las barreras superan a las aportaciones positivas”.
¿Y el feed-back de los profesionales? El emprendedor asegura que los oftalmólogos que ya lo han probado “alucinan” al conversar con Luke Assitant. La hoja de ruta de Lumotech pasa por presentar el proyecto una vez comience la ‘temporada’ de congresos en septiembre y testearlo en varias clínicas antes de cerrar una primera ronda de inversión. “También buscamos despertar la conciencia de que estas herramientas son el futuro de la medicina, nos gusté o no. Lo cierto es que disminuyen errores y maximizan la eficiencia de los procesos. Los médicos reciben algo así como súper-poderes. Es bueno para todos”.